Los alumnos de doceavo año del Colegio Atid dieron fin a su paso por el Colegio Atid con una emotiva ceremonia de graduación. Decenas de rostros nostálgicos y orgullosos escucharon con atención las palabras de sus directores y compañeros, quienes los invitaron a caminar hacia su siguiente aventura, sin olvidar al colegio que ha sido su casa durante 16 años.
Compilaciones de fotografías y obras de arte de los graduados adornaron el salón al que ingresaron con toga y birrete. Familiares e invitados los acompañaron durante este evento en el que directores, patronato, Comunidad Maguen David y el consejo escolar reconocieron el esfuerzo que los alumnos demostraron durante Upper High School. La Directora General, Kathy Fine los exhortó a permanecer unidos y continuar creando comunidad, al citar un poema Hopi: “Ustedes son a quienes han estado esperando”.
Durante el evento, se le entregó su diploma a cada estudiante y se reconoció a varios de ellos por su destacada labor en actividades especiales, propias del perfil académico IB (International Baccalaureate). Estos alumnos cosecharon éxitos en actividades deportivas, creativas, de acción y servicio social, de reforzamiento de su identidad Judía, etc. La excelencia académica de algunos de ellos, resultó incluso en becas para instituciones prestigiosas como la Universidad Anáhuac Norte, Universidad Iberoamericana y Universidad Westhill, que estuvieron presentes en la ceremonia.
Los padres y familiares se mostraron orgullosos y felices. Sin duda se trató de un momento para el que ellos también trabajaron duro por muchos años. “Me siento extremadamente orgulloso de lo que han logrado todos estos muchachos. Ahora empieza lo bueno de la vida, le deben echar muchas ganas, tener una actitud positiva y encomendarse a D-os para que los ayude en todo camino que recorran”. –Simón Shamosh, papá de Arlette Shamosh. El esfuerzo no fue en balde y los estudiantes también expresaron su profundo agradecimiento. “A mis papás les doy muchas gracias por siempre apoyarme y por hacerme sentir que soy un orgullo para ellos”. – Margaret Saba, graduada.
Hubo un momento especial durante la noche. Si bien los alumnos se graduaron oficialmente, varias familias lo hicieron de manera simbólica. Los padres de 22 alumnos fueron reconocidos, pues tras muchos años de formar parte de la familia Atid, hoy gradúan a su último hijo, llegando de este modo su momento de avanzar a una nueva faceta.
El evento, el ciclo escolar y toda una etapa en la vida de los graduados cerraron con broche de oro en medio de aplausos y con birretes volando en el aire. Las sonrisas y lágrimas de nostalgia no se hicieron esperar cuando por última vez, los ahora exalumnos entonaron el himno del Colegio Atid.
Con todo el aprendizaje, experiencias y amistades cultivadas, los jóvenes emprenden sus propios caminos. Pero, como les dijo el Presidente del consejo estudiantil, David Rayek: “En momentos de duda, pueden mirar hacia atrás y recordar de dónde vienen, para convencerse de que todo estará bien”.
La educación no ha terminado. El proceso de aprender es un recorrido de toda la vida. Mientras se encuentran en él, recuerden con cariño a nuestro amado Atid”. – Marcos Laniado, Valedictorian de la generación 2017.
¡Muchas felicidades!
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