El Gobierno de Israel afirma que no retirará los detectores de metales instalados en tres entradas del Monte del Templo tras el atentado del 14 de julio -en el que fueron asesinados dos policías- y se esperan protestas multitudinarias en el lugar hoy viernes, día de rezo musulmán.
“Israel está decidido a mantener el statu quo en el Monte del Templo y la libertad de acceso a los lugares santos”, indicó la Oficina del Primer Ministro, Biniamín Netanyahu, en un comunicado emitido tras cuatro horas de reunión con el Gabinete de Seguridad.
“El Gabinete ha autorizado a la Policía que garantice el libre acceso a los lugares sagrados, al tiempo que mantiene la seguridad y el orden públicos”, añadió la nota.
El portavoz de la Policía, Micky Rosenfeld, anunció que esta jornada se permitirá entrar al complejo del Monte del Templo a hombres mayores de 50 años y mujeres de todas las edades.
Anoche se produjeron nuevos enfrentamientos en las inmediaciones del Monte del Templo entre manifestantes palestinos y policías israelíes que causaron 22 heridos, según los reportes.
Los testigos relataron que la Policía dispersó a cientos de manifestantes, muchos de los cuales lanzaban piedras, utilizando docenas de bombas de estruendo.
Después del ataque del viernes pasado, en el que los policías árabe israelíes drusos Hael Satawi y Kamil Shanan fueron asesinados por tres terroristas árabe israelíes, abatidos a su vez por las Fuerzas de Seguridad israelíes, la Policía cerró el acceso al Monte del Templo durante dos días en busca de armas.
El domingo, las autoridades israelíes abrieron de nuevo el complejo, pero después de haber instalado unos arcos detectores de metales que los fieles deben atravesar. EFE y Aurora
No se puede comfiar en los
Arabes,son muy tracioneros.
Shalom.