El periodista Jeffrey Goldberg, considerado cercano al presidente estadounidense, Barack Obama, admitió que el primer ministro, Biniamín Netanyahu, tiene un “argumento creíble” para hacer contra el inminente acuerdo nuclear con Irán.
Netanyahu tiene programado hablar el martes próximo sobre la cuestión en su discurso ante el Congreso norteamericano.
En su editorial, en el diario The Atlantic, Goldberg escribió que tras el discurso de Netanyahu, “el foco volverá al presidente, a sus planes para el Oriente Medio y a las numerosas promesas que hizo sobre Irán y su programa nuclear”.
“Estoy bastante seguro de que Netanyahu pronunciará un poderoso discurso, en parte por su elocuencia en inglés y su contundencia en la presentación. Pero hay otra razón por la que este discurso puede ser fuerte: Netanyahu tiene un argumento creíble. Cualquier acuerdo nuclear que permita a Irán mantener una capacidad de enriquecimiento de uranio doméstico es una propuesta arriesgada. De hecho, cualquier acuerdo con el régimen teocrático terrorista, imperio en construcción, patrocinador de Assad, conquistador del Yemen y que odia Israel, es una propuesta arriesgada”, continuó Goldberg.
“El acuerdo que parece estar se está gestando en este momento no me no llena de confianza – y tampoco a muchos otros que apoyan una solución diplomática a la crisis –”, admitió.
“Los informes sugieren que el futuro acuerdo legitimará el derecho de Irán a enriquecer uranio (un” derecho” que no existe actualmente en el derecho internacional); que permitirá a Teherán mantener funcionando varios miles de centrifugadoras; y que quedará rescindido después de diez o quince años, momento tras el cual, Irán sería teóricamente libre para volverse nuclear. (La cuestión de la cláusula de caducidad me preocupa, pero estoy aún más preocupado de que los iraníes encuentren la manera de engañarnos y salirse del acuerdo, incluso antes de que el sol se ponga)”, señala el periodista.
Goldberg sostiene de que el hecho de que Netanyahu “no tenga ideas reales”, para resolver el problema iraní “no exime a la Administración Obama de su responsabilidad de conseguir el acuerdo más duro posible”.
“Este es un momento muy peligroso para Obama y para el mundo. Él ha hecho muchas promesas, y si no logra mantenerlas – si inadvertidamente (o, Dios no lo quiera, advertidamente) pone a Irán en la ruta hacia el umbral nuclear, será recordado siempre como el presidente que desató una carrera de armas nucleares en la región más volátil del mundo, y por romper una antigua promesa de décadas hacia Israel de que Estados Unidos defenderá su existencia y su viabilidad como Estado-nación del pueblo judío”, advirtió Goldberg.
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