El Tribunal Superior de Israel emitió una orden temporal que impide la aplicación de la ley que apunta a evitar la inmigración ilegal en el país y que recientemente fue modificada y aprobada por la Knesset.
La orden evita que poner en funcionamiento a la última modificación de ley realizada por el parlamento israelí a comienzos de este mes.
La ley establece que los infiltrados ilegales sean llevados por tres meses al centro de detención abierto Holot en el Neguev, y del mismo modo que no sean transferidos a la instalación cerrada Saharonim, según informó la agencia nacional de noticias de Israel “Arutz Sheva”.
En tanto que el Estado deberá responder a la medida dentro de los próximos diez días.
El Director de la ONG israelí del Centro de Política de Inmigración, Orli Yogir, respondió a la decisión, y manifestó que esta es “una decisión horrible”, ya que “el orden temporal que el Tribunal Superior emitió provoca daños en el fundamento democrático israelí y abandona al Estado de Israel sin la posibilidad de defender su soberanía de ilegal la inmigración “.
Y añadió: “Los que van a pagar el precio de este abandono son ciudadanos del Estado de Israel, y los residentes del sur de Tel Aviv, en particular”.
La infiltración ilegal es un tema grave en Israel, sobre todo en el sur de Tel Aviv, donde los residentes están expuestos a la delincuencia sin fin y en la que muchos residentes judíos están aterrorizados de salir de sus casas y ruega gobierno que tome medidas.
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