El presidente de la Federación de Comunidades Judías de España, Isaac Querub, encabezaba la numerosa delegación recibida esta mañana en el Palacio de la Zarzuela, con cuyos integrantes ha posado el Monarca para los medios gráficos en la escalera de acceso a los jardines antes de reunirse con ellos a puerta cerrada en el salón de audiencias.
Ávila ha acogido desde el lunes 27 de abril las sesiones de trabajo de la III Cumbre de la Plataforma Erensya, cuyo objetivo es tender puentes entre España y las comunidades sefardíes y en la que participan más de 70 representantes de la diáspora, procedentes, entre otras ciudades, de El Cairo, Buenos Aires, Río de Janeiro, Santiago de Chile, Panamá, México, París, Estambul, Sofía, Sarajevo y Belgrado.
Durante las reuniones de Ávila, los participantes en la cumbre han abordado cuestiones como la entrada en vigor de la ley de nacionalidad para sefardíes, actualmente en el Senado, el mantenimiento del ladino y las relaciones intergeneracionales.
En la sesión inaugural, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, destacó la importancia de la ley que concederá la nacionalidad española a los sefardíes para satisfacer una “deuda histórica” y “construir juntos, frente a la intolerancia de tiempos pasados, un nuevo espacio de convivencia y concordia que reabra para siempre a las comunidades expulsadas de España las puertas de su antiguo país”.
Tras esta audiencia en la Zarzuela, el programa institucional de la cumbre se completa hoy con una visita al Colegio Ibn Gabirol y a la sede de la Comunidad Judía en Madrid, donde tendrá lugar un almuerzo con la asistencia del embajador israelí, Alon Bar, y la alcaldesa de la capital, Ana Botella.
Los participantes en la cumbre se desplazarán mañana a Toledo, donde les recibirá el alcalde, Emiliano García-Page -que ha asistido hoy a la audiencia- y recorrerán las calles y templos de la Judería, mientras que el viernes acudirán a la localidad burgalesa de Castrillo Mota de Judíos, que el año pasado decidió en referéndum despojarse de su antiguo nombre, Matajudíos.
El pasado lunes, don Felipe tuvo ocasión de analizar el contenido previsto en esta III Cumbre Global de la Plataforma Erensya con el Gran Rabino Sefardí de Jerusalén, Shlomo Moshé Amar, a quien recibió en audiencia en la Zarzuela.
Moshé Amar (Casablanca, 1948) ya había sido recibido por el Rey Juan Carlos en junio de 2013, después de inaugurar en Murcia unas jornadas sobre la cultura israelí, y dos años antes había acudido a Granada en la primera visita de un líder de los descendientes de los expulsados en 1492 por los Reyes Católicos tras la conquista de la ciudad.
La primera Cumbre Erensya se celebró en Bulgaria (Sofía y Plovdiv) en 2011, mientras que la segunda tuvo lugar en Turquía (Estambul y Esmirna) en 2013.
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