El tercer y último debate presidencial entre la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump terminó el miércoles en Las Vegas y dejó una pregunta: “¿Quién ganó?”.
Según la encuesta realizada por CNN/ORC entre un grupo de 547 votantes registrados que vieron el debate, una medición que ya se había usado en los dos anteriores debates, la ex secretaria de Estado se impuso sobre el magnate inmobiliario con el 52% de las preferencias contra 39 por ciento.
Por otro lado, la consultora YouGov también le dio la victoria a Clinton, con el 49 por ciento contra el 39 por ciento de su rival.
RealClearPolitics, el portal especializado que recopila las diferentes encuestas permanentes sobre las preferencias del público, dio tras el debate una ventaja de Clinton sobre Trump que alcanza lo 6,9 puntos.
En tanto que Chris Cilliza, del Washington Post, consideró que éste fue el mejor debate de Clinton y que se mantuvo calma durante las interrupciones de Trump, como cuando el el empresario le dijo que era “una mujer desagradable”. Al elegir los momentos en los que ignorar o atacar al empresario, Clinton fue la ganadora del tercer debate, según Cilliza.
Tal fue la virulencia de las campaña y los debates que los candidatos ni se saludaron cuando terminó (Reuters)
Los analistas del L.A. Times, Cathleen Decker, David Lauter y Doyle McManus, también concedieron la victoria a la ex primera dama y senadora.
También el diario digital Vox habló de una “aplastante” victoria de parte de Clinton.
Por su parte, la cadena Fox News apuntó que Trump “volvió a desperdiciar” una oportunidad de atacar a Clinton, aunque igual subrayó que fue la mejor participación del magnate en las tres confrontaciones. Al igual que la mayoría de medios, destacó la falta de compromiso del republicano para aceptar los resultados como lo más sorprendente del debate. “Trump tuvo varios puntos ganadores hasta que llegó su terrible error”, repasaron.
Mientras que el sitio especializado Politico consideró que el del miércoles fue el mejor desempeño hasta la fecha de Clinton, en un debate que vio uno de los errores más fuertes de Trump, al conceder que podría no aceptar una derrota en las elecciones.
De cualquiera manera, ambos candidatos declararon la victoria en el debate al citar sus propias fuentes cercanas.
“Estoy honrado por ganar el debate final y por nuestro movimiento”, celebró en Twitter el republicano. Por su parte, la campaña de Clinton se limitó a un escueto mensaje que mostraba la encuesta de CNN y la etiqueta “Ella ganó”.
Con el fin de la última chance entre ambos candidatos para argumentar, pelear y convencer, las miradas están puestas ahora en el 8 de noviembre, cuando los estadounidenses acudan a las urnas tras una larga e inusualmente virulenta campaña para elegir a su nuevo presidente.
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