El adolescente árabe-israelí Mohammed Zoabi participó en la Gadna, un programa que lleva a los estudiantes de secundaria israelíes a una base militar para la educación en la historia sionista, así como una introducción básica a los militares.
“Hoy me siento orgulloso. Orgulloso de ser israelí, orgulloso de ser un musulmán israelí que se alista en el ejército, en menos de dos años, y por supuesto, orgulloso de que yo soy capaz de sobrevivir a una semana viviendo en una base del ejército en el medio de la nada”, dijo Zoabi, según a The Israel Project .
Zoabi, un residente de la ciudad del norte de Nazaret, se hizo famoso después de publicar un video en las redes sociales en árabe, hebreo e Inglés exigiendo la devolución de tres adolescentes judíos que fueron secuestrados por terroristas palestinos en junio pasado. Más tarde se reveló que los niños habían sido asesinados poco después de su secuestro. Después de varias amenazas a su seguridad, incluso de sus propios parientes, Zoabi se vio obligado a huir del país temporalmente.
Aunque hay una larga historia de minorías étnicas y religiosas no judíos en Israel que sirven en el ejército israelí, sólo recientemente ha habido un aumento importante de la participación árabe en el servicio militar. Drusos y circasianos han sido requeridos por la ley israelí para servir desde la década de 1950 – a petición de las comunidades – y muchos beduinos sirven también.
En 2002, aproximadamente 400 musulmanes y cristianos árabes se alistaron en el ejército israelí, y 2.400 fueron voluntarios para la administración pública, por lo general con la policía o los servicios penitenciarios. Por ejemplo, el hijo del Padre Gabriel Nadaf de la Iglesia Ortodoxa Griega, un partidario de la integración cristiana en el IDF, se alistó en diciembre pasado.
En la actualidad, el de más alto rango musulmán en la FID es el mayor Ala Wahib. Wahib indicó en una entrevista de 2012 con Israel Hayom que muchos otros habían estado ansiosos de alistarse, pero fueron desalentados por la presión de sus familias y pueblos.
“Yo creo en la fe musulmana, y nunca voy a abandonarla, pero creo que el sionismo es más que una religión. Es algo que representa totalmente mi sentido de pertenencia al Estado de Israel y de la sociedad israelí, y el inmenso compromiso que tengo con la protección y la vigilancia del país de la que soy parte”, declaró Wahib.
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