Construyendo el Arca

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“… Y la tierra estaba llena de violencia, injusticia, ilegalidad y maldad.”

Así comienza uno de los relatos más conocidos del mundo occidental, la historia de Noé y su arca- el objeto de estudio de la Torá de esta semana.

Centrarse en la historicidad de la narración es una mala lectura del texto. Su importancia no está en lo que sucedió, sino en lo que sucede cuando el mundo se encamina por un sendero autodestructivo.


Se puede decir que el mundo está constantemente sumergido en la violencia, la injusticia, el desorden social, y la maldad- lo que es expresado por la palabra hebrea “jamas” – Noé nos dice, sin embargo, que hay grados de “jamas” y que hay un tipo de “jamas” que es insoportable.

Es en ese punto, donde el justo de la generación es aquel que construye un receptáculo. Es intrascendente, en esta etapa, la dirección que este a de a tomar, lo que es importante es que sea capaz de mantenerse a flote en medio el caos que lo rodea. Lo que importa es que pueda salvar a quellos que deberán reconstruir lo que se está siendo destruido.

Si hay un lugar dónde se ha llegado a un “jamas” insoportable, este es Siria. Un lugar donde ya más de 470. 000 seres humanos han sido asesinados, 50.000 de entre ellos niños menores de 15 años.

Dos millones y medio de niños languidecen en campos de refugiados, sin acceso a servicios básicos de salud y educación. 306.000 han nacido en esos campos desde que la guerra civil comenzó hace cinco años.

Cuando se le preguntó a Moti Kahana, uno de los miembros de un grupo de hombres de negocios israelíes y judíos norteamericanos que viajan a los campos de refugiados sirios para proporcionar ayuda humanitaria, por qué lo hace, respondió: “somos judíos e israelíes y no podemos permanecer sentado de brazos cruzados cuando al lado nuestro mujeres y niños están siendo masacrados.”

El mantenerse la concentración en la maldad humana y la capacidad de poder obrar con rectitud, caracteriza a la literatura bíblica y define el judaísmo. Como lo expone la Mishná:

“No es la exposición de ideas lo importante, sino el accionar”

Así Gal Lusky la fundadora y directora ejecutiva de Israel Flying Aid, un grupo que hace cosas tales como volar suministros a refugiados y sobrevivientes en Siria, es una de las que esta construyendo el arca.

Igualmente IsraAID (El Foro de Israel para la ayuda humanitaria internacional), fundada en Israel en el 2001, es una organización que agrupa a más de 35 organizaciones israelíes y judías no gubernamentales y a otras personas activas en esfuerzos de socorro y alivio alrededor del mundo la que está respondiendo a las necesidades de los refugiados sirios en los países que los acogen.

IL4Syrians un grupo de ciudadanos israelíes que “aman a su tierra natal y creen en una tradición y cultura judía que valora el respeto compasivo, la mente abierta hacia la santidad de toda vida humana,” va de incógnito a Siria ,varias veces por año, para entregar suministros médicos y entrenar a asistentes médicos y socorristas.

Es hospitales israelíes tales como el Centro Médico Ziv, localizado a unos pocos kilómetros de la frontera con Siria, se tratan a cientos de heridos y enfermos sirios realizando operaciones que salvan la vida a la vez que atendiendo el tremendo trauma psicológico de pacientes que a menudo han perdido a todos y todo lo que poseían.

Es cierto que el mundo entero, posee relatos de un primitivo diluvio, sin embargo, sólo un pueblo entendió el significado de esta historia de manera lo suficientemente profunda para no sólo mantenerlo como parte de su literatura fundacional y estudiarlo todos los años, sino para que sirva de fundamento de lo que los judíos no deben hacer: “permanecer de brazos cruzados ante la sangre del prójimo” (Levítico 19: 16)

Acerca de Moshe Pitchon

Moshe Pitchon es un pensador judío y el director de BY un centro de estudios e investigación del judaísmo contemporáneo basado en el sur de la Florida en los Estados Unidos.

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