Días pasados dieron una conferencia de prensa el Dr. Raúl Zaffaroni y la Sra. Estela de Carlotto, tratando de explicar lo inexplicable como ser las detenciones de De Vido y Boudou; parece que lo que más les preocupó son las fotos de ambos al ser conducidos a la cárcel cumpliendo la orden judicial respectiva. Zaffaroni podrá tener todos los títulos académicos y doctorados honoris causa para lucir que quiera, pero carece de integridad moral y sentido común para ejercer la defensa de los DD.HH., según lo que hemos visto y vivido en nuestro país.
Autor e impulsor de la doctrina que lleva su nombre (zaffaroniana), enseñó desde la cátedra y los libros que esos DD.HH. son para ser aplicados en defensa de los victimarios y no de las víctimas; los estudiantes que ahora son parte de la judicatura, liberan con reducción de condenas o salidas transitorias a asesinos, violadores o narcos, desconociendo los peritajes o recomendaciones de los servicios carcelarios.
La reincidencia es absoluta: en el caso de las violaciones seguidas de muerte y a pesar de la opinión de todos los médicos siquiatras y legistas sobre que el violador es una persona irrecuperable, el “experto sicólogo” Zaffaroni dice lo contrario y defiende a los jueces acusados ante el Consejo de la Magistratura.
Pero dijo algo más grave: que en la Argentina el gobierno de Macri está dejando de lado el Estado de Derecho. Esto lo afirma el juez que juró como Camarista en San Luis en 1969 por el Estatuto de Onganía, en 1973 como juez Penal por la Constitución de Lanusse y en 1976 ante el dictador Jorge R.Videla como juez en lo Criminal de Sentencia de la Capital Federal. A esto debemos agregar que entre 1976 y 1983 recibió más de 120 recursos de habeas corpus NO concediendo ninguno.
En cuanto a la Sra. de Carlotto, que adhirió a la posición de Zaffaroni y agregó “si pudimos con la dictadura vamos a poder con Macri”, debo respetarla en su dolor pero sin hipocresía preguntarle si se acordó de los DD.HH. cuando asesinaron al fiscal Nisman z’l y llamó a las hijas o familiares del fiscal para apoyarlos? o se acordó alguna vez de Paula Lambruschini de 15 años o de la niña María Cristina Viola de 3 años (los guerrilleros autores de los crímenes fueron condenados en 1979 a prisión perpetua y liberados en 1987) o de Julio López o de Mariano Ferreyra o de Micaela García de 12 años en Gualeguay ?.
Le pregunto tambien, sin tapujos, si en esos viajes que hizo al exterior visitó y dió conferencias en Israel ? qué les dijo a los padres de los niños y jóvenes israelíes asesinados por bombas o con cuchillos por los terroristas palestinos?. qué opinión le merecen los atentados criminales de los terroristas del ISIS en París, Londres, Madrid, Nueva York, Las Vegas,etc. No se vulneran los DD.HH.?
Otra pregunta que me surge mientras escribo estas líneas: Sra. Estela: se puso a pensar alguna vez en los chicos aborígenes del Noreste Argentino que mueren de hambre o enfermedades o sed, que son perseguidos y eliminados por los gobernadores feudales como Insfran, Capitanich o Closs de su mismo partido político ? y se acuerda cuando bajaron a Buenos Aires y acamparon en la calle frente al Ministerio de Bienestar Social de Alicia Kirchner que no los atendió igual que CFK y la gente de La Cámpora los echó a patadas ?.
Claro, a Ud. y a su gran amigo Pérez Esquivel les interesa y protegen solamente a los terroristas mapuches, asesinos e invasores del sur de la Patagonia: políticamente eso es lo correcto para Ud. que se candidatea, de manera risible, al premio Nobel de La Paz. Los pobres del norte no son humanos y no tienen derechos?.
Para finalizar quisiera que, imaginariamente, volvamos a noviembre de 1945 en que comienza el Juicio de Nuremberg, se ubiquen Ud., Pérez Esquivel y Zaffaroni frente a los justiciables, qué les dirían a los asesinos carniceros nazis?. Yo se lo digo: amigos no se preocupen, no vamos a vulnerar sus derechos humanos; esos millones de seres sin nombres pero con números para mejor identificación, fueron “invitados” a concurrir a las cámaras de gas luego de pasar unas “vacaciones” en los “campamentos” de concentración.Uds. cumplieron con su deber…. Perdón Carlotto, Pérez y Zaffaroni pero sabiendo sus formas de pensar, me dan muchas ganas de vomitarles encima, me revuelven las tripas su hipocresía y miserabilidad.
Termino con estas palabras del escritor de Estados Unidos nacido en 1947 Paul Auster:“Si la Justicia existe, tiene que ser para todos: nadie puede ser excluído, de lo contrario ya no sería Justicia”.
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