Un rio desbordado que arrasa todo a su paso…
Pensamiento que todo está en mi contra…
Una verdad vestida de tragedia…
Eso es la angustia.
Existen momentos en nuestra vida en que la
angustia se hace presente.
Porque ignoramos un desenlace futuro…
Porque el factor riesgo va implícito en algunas de
nuestra acciones…
Porque el resultado de algo puede ser definitivo
para bien o para mal.
La angustia es inherente a la vida misma, lo ideal
es poderla manejar sin que nos afecte al grado de
la inmovilidad física y mental.
La angustia cuando es manejable, cuando la
podemos controlar nos aviva, nos alertamos
más…
En el momento que este sentir nos sobrepasa y
nos domina; puede ser un síntoma del un mal
mayor.
Actualmente la ciencia ha alcanzado logros muy
notables en el campo de la medicina…
Será entonces un gran error de parte nuestra no
buscar ayuda que a veces nuestro ser la
necesita… ¡ Ya!
Artículos Relacionados: