Mañana a la mañana vuelvo a abandonar Buenos Aires y es la enésima vez que lo hago desde el año 1973. Si bien la razón de venir fue siempre una, las excusas eran muchas. La verdadera razón es que Argentina en realidad es una amante imposible de olvidar y una y otra vez, hay que volver a recuperar las fuerzas disfrutando de la dulzura de su miel. Cuando pienso en las excusas, ahora que ya soy una persona de considerable edad, me divierto pensando en ellas. Algunas parecen de película como decir que deseo que los abuelos conozcan las nietas, luego era la salud de los abuelos de las nietas, más tarde el entierro de los abuelos de los nietos. ¡Incluso vine a pasar mí luna de miel!!! No dejé de venir a matrimonios de sobrinos y de hijos de amigos. Todo era legítimo para visitar Argentina, como decía.
En la misma medida, puedo decir que no vine para el mundial del 78, para no ser partícipe de la fiesta del régimen militar. Cuando me mandaron a trabajar a España, aproveché comprar a mi cuenta el pasaje Madrid-Buenos Aires-Madrid. Un par de años después, cuando me mandaron a trabajar a Brasil, ya fui más vivo y compré a cuenta del patrón el pasaje Tel Aviv, San Paolo, Buenos Aires, Tel Aviv, vía Madrid. Y esto logré hacer dos veces. No había motivo para dejar de visitar mi amante Argentina. En realidad, no fueron dos veces vía Madrid, una vez vía Madrid con Iberia y la segunda vía Frankfurt con Lufthansa. Durante los años vine a visitar a mi amante argentina con PLUNA, Aerolíneas Argentinas, VARIG, Continental y seguramente alguna otra empresa aérea.
Pasando los años he desarrollado una teoría en la cual no importa quien está en el gobierno, Buenos Aires es preciosa, es la capital del Plata y siempre, siempre atractiva. Su sistema de transporte, sus vías de transporte, las medias lunas, las pizzas, las pastas y en especial su carne, siempre son de calidad. He ido en 10 minutos desde Libertador y General Paz hasta el Obelisco en la 9 de Julio. No he visto esto en México ni en Bogotá, grandes ciudades que he visitado el último año.
Previendo que el oficialismo anterior perdería las elecciones del año pasado, me apresuré a venir a visitar antes de las elecciones, los últimos días del jolgorio de CFK y ahora los primeros días del jolgorio MM. Encontré un poco más caras las cosas, por ejemplo, los viajes en la ciudad aumentaron de 3,50 pesos a 6,50 pesos; como yo camino mucho no me afecta en especial y soy turista y tampoco les afecta a los que viajan en sus propios coches. La vez pasada no recuerdo cuanto costaba la hora de parqueo, pero esta vez me pareció bastante caro, pues en el parqueadero de la Rural cuando fuimos a visitar Arteba pagamos a razón de 54 pesos la hora. El restaurante Cabaña Las Lilas en Puerto Madero es sustancialmente más caro que el restaurante Puerto Madero en Cancún , que no tiene nada que ver con Puerto Madero, pero aprovecha la fama de este importante sitio culinario y turístico de la capital del Plata.
Ya tengo en mente la próxima excusa para venir a visitar Argentina, pero eso contaré en la crónica del viaje próximo.
De cena en cena, con Betty D.
Yossi May 25-5-2016
Artículos Relacionados: