Yo creo es el título de un poema escrito por Shaul Tchernichovsky en Odessa en 1892. Se ha sugerido que este poema que ya tiene música, sea declarado substituto o alternativa para el himno nacional de Israel, Hatikvah.
Yo Creo
Alegraos, alegraos hoy en los sueños.
Yo el sonador os habla
Alegraos porque tengo fe en la humanidad
Porque creo en la humanidad.
Porque mi alma todavía añora la libertad
No la he vendido a un becerro de oro
Porque tendré fe en la humanidad
En su espíritu grande y atrevido
Que se desprenderá de cadenas de opresión
Nos elevara, iremos con la frente alta
Los obreros no morirán de hambre
Las almas –ofrecerán a los pobres- pan
Alegraos porque tengo fe en la amistad
Encontrare un corazón – esta es mi fe-
Un corazón que comparta todas mis esperanzas
Un corazón que sienta tanto alegría como dolor
Y tendré fe en el futuro
Aunque ese día todavía no amanece
Seguro llegara cuando las naciones
Todas vivan en bendita paz.
Entonces mi pueblo florecerá
Y una generación se levantará
En el país, sacudirá sus cadenas
Y verá la luz en cada pupila
Vivirá, amará, creará, trabajará
En la tierra estará vivo
No en el futuro, no en el cielo
Y entonces su espíritu vivirá
Un poeta cantará un himno diferente
Su corazón conocerá la belleza sublime
Para el, para ese joven, sobre mi tumba
Los capullos tejerán una corona.
Shaul Tchernichovsky, uno de los poetas más importantes de la literatura hebrea moderna, nació en Ucrania el 20 de agosto de 1875 en el seno de una familia judía moderna, inicio sus estudios en una escuela religiosa y a los 10 años ingreso a una escuela rusa, en Odessa estudio idiomas, alemán, francés, inglés, griego y latín, llegó a ser un excelente traductor de obras clásicas, como poeta asimilo la influencia de la cultura griega clásica y la reflejo en su obra.
La universidad no lo admitió y viajo a Heidelberg a estudiar medicina, se tituló en Lausane y desde entonces trabajo como médico, poeta, traductor. Volvió a Rusia. a San Petersburgo y sirvió como médico militar en el ejército ruso en la I Guerra Mundial.
Fue editor del periódico Hatekufa y edito la sección de medicina de la enciclopedia hebrea Eshkol. Viajó a América y en 1931 emigro a Palestina con su esposa Melania Karlova. En Tel Aviv editó el Manual de Terminología Médica y de Ciencias Naturales en inglés, latín y hebreo. Trabajo como doctor en las escuelas municipales, Participo en organizaciones de escritores y en el comité dedicado a la modernización del idioma hebreo, sin abandonar nunca la creación de sus poemas.
En ’36 se trasladó a Jerusalén, empleado por Shoken como poeta y traductor. Murió en Jerusalén el 14 de octubre de 1943.
Shaul Tchernichovsky recibió dos veces el premio Bialik, después de su muerte se creó en su honor el premio para traducciones que lleva su nombre.
El Banco de Israel eligió en 2011 a cuatro poetas para rendirles honor, imprimiendo sus imágenes en los nuevos billetes. Uno de los poetas fue Tchernichovsky, cuya imagen está en los billetes de 50 shekel desde el 10 de septiembre de 2014.
Tchernichovsky escogió la forma de los sonetos para expresar sus emociones, sus sentimientos, el amor a su pueblo y su historia con sus tragedias y avatares. Muchos de sus poemas se han convertido en canciones populares siempre vivas acompañados con la música escrita especialmente por compositores como Nomi Shemer o Shlomo Artzi.
El mismo día, el 4 de diciembre, que el periódico Haaretz publicó el poema de la semana, Yo Creo, en otra sección dio a conocer la determinación inapelable respecto a la imagen del poeta que sigue presente del rabino Benzion Mutzafi, quien, a continuación de una clase de fin de semana, saco un billete de su bolsillo y dijo a uno de sus alumnos que le debía estar prohibido mirar el billete de 50 shekel.
Su explicación escrita dice: “En cuanto a la figura que lo ilustra, es sabido que estaba casado con una cristiana devota que iba a misa los domingos.
Se cuenta que el rabino Kook le imploró a Tchernichovsky que tratara de convencer a su esposa de que se convirtiera al judaísmo, pero el poeta se negó.” Mutzafi agregó, “en nuestra tradición hay escritos graves sobre quien vive con un cristiano…esas gentes son llamadas apostatas. Por lo tanto, pongo el billete doblado al revés para que ni por un segundo tenga que verlo.”
Como rabino mayor de la comunidad sefaradí su orden tiene impacto directo en sus seguidores. Deben abstenerse de mirar la imagen en los billetes, pero pueden seguir usándolos.
Artículos Relacionados: