Mario Satz
Artículos Publicados
Un trozo de vida para la vida
Me llegan noticas de los homenajes y evocaciones que Francia prepara para honrar a su máxima figura de mimo: Marcel Marceau, quien en realidad se llamaba Mangel de apellido y, como tantos judíos del...
Monseñor Capucci: muérase otra vez
De todos los enemigos que un pueblo pueda tener los peores son lo religiosos. La teología es en ellos el adhesivo que los mantiene pegados a su odio. Tal fue el...
La Palmera Transparente
Sobre la energía
En la Varsovia de antes de la guerra y el exterminio, una noche de verano, dos compañeros de la casa de estudios llamada Or ganuz, luz oculta, discutían acerca del versículo de...
El encuentro con lo divino
En el lenguaje kabalístico se habla de la or holéj, la luz que se va, y la luz que vuelve, or jozer, en un proceso continuo de expansión y contracción cósmicas que...
Saber elogiar, saber perdonar
De los tres verbos que hallamos en hebreo para la palabra elogiar, dos tienen un carácter religioso-el que alude a la alabanza y el que señala el acto de elevar a alguien a una...
Una suma prodigiosa
Puesto que en el Séfer yetzirá o Libro de la formación, texto kabalístico medieval de gran influencia sobre los estudiosos de la mística judía, se dice que si al corazón humano...
La péntada de la salud griega y los nombres hebreos del alma
Pitágoras, el filósofo griego, sostenía que si en la entrada de los Templos de Esculapio, el dios de la medicina, habían dos estatuas, la de Eros, dios del amor, y la de Higea, diosa...
El fondo Kati
Hacia mediados de 1467 Ali Ben Ziyad al-Quti partió de la ciudad de Toledo rumbo al exilio. Iba con su familia y algún que otro servidor. Su destino, lejano y polvoriento, era Tombuctú. Ali...
El vacío y la fe
-La mayoría de las personas creen-solía decir Rabí Meir Mandolino de Ferrara-, que la fe es una cuestión de dogma, un sostén preciso, algo definible, y no se dan cuenta de que la fe...
El valor de un chiste
Dicen, pero no hay prueba escrita de ello, que el Baal Shem Tob opinaba que los chistes, cuando se dicen con bondad y alegría, sin ánimo de herir a quien los escucha, son destellos...