- Durante 10 días, la Feria Internacional del Libro Judío (FILJU) acogió a más de 7,500 visitantes en 126 eventos.
- Adultos, jóvenes y niños se dieron cita en el Centro Cultural Bella Época en un acercamiento inédito a las costumbres y tradiciones de la cultura judía en México.
- 57 eventos en el auditorio, 48 en la galería y 21 en el área infantil, dieron como resultado un constante flujo de visitantes que adquirieron más de 10,000 ejemplares de distintos títulos.
Del 10 al 20 de agosto, el Centro de Documentación e Investigación Judío de México (CDIJUM), con el apoyo del Fondo de Cultura Económica (FCE), realizó la Feria Internacional del Libro Judío en el Centro Cultural Bella Época, espacio en el que se dieron cita músicos, artistas, académicos, cineastas y, por supuesto, escritores.
Entre estos últimos se contó con la presencia de cuatro autores extranjeros: los israelíes Fania Oz-Salzberger, Nir Baram y Shimon Adam, y el español Xavier Güell. Los cuatro presentaron sus obras más recientes y conversaron con el público asistente acerca de sus respectivos temas de interés.
Además de los invitados de fuera de México, se contó con la presentación de más de 40 libros, conciertos, obras de teatro, proyecciones cinematográficas y talleres. Uno de los eventos más emotivos fue el homenaje a la trayectoria de Margo Glantz, en el que se reconocieron sus aportes a la literatura mexicana. Y, hablando de homenajes, también resaltó el que se llevó a cabo para recordar al antropólogo e historiador Friederich Katz, a 90 años de su nacimiento.
La FILJU cumplió su propósito de ser un espacio para el diálogo y la reflexión en torno a diversos temas políticos y sociales, con mesas como La ética judía en la medicina, en la que participaron los doctores Jose Halabe, David Kershenobich y Bernardo Tanur; y Antisemitismo: los prejuicios contra los judíos, con Ignacio Cuevas de la Garza, Renée Dayán y Alexandra Haas. Por su parte, Hillel Levine, José Hamra y Esther Shabot fueron los encargados de ofrecer un diálogo sobre la situación entre israelíes y palestinos; mientras que los rabinos Abraham Tobal y Leonel Levy, acompañados del académico Daniel Fainstein, respondieron a todas las preguntas del público presente acerca del judaísmo.
Con una asistencia promedio de ochocientos visitantes diarios, y una venta general de más de diez mil ejemplares, la Feria Internacional del Libro Judío se queda en el referente de sus auspiciantes, patrocinadores, participantes y visitantes como un evento que brilló por la diversidad de sus actividades y su poder de convocatoria.
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