“Musicales de Broadway: Un legado judío”; se proyectó en Plaza Carzo, uno de los documentales que ofrece en esta temporada el Festival de Cine Judío. Contando con la presencia del Presidente del festival; Mark Liwerant y del Director del mismo; Isidoro Hamui. Finalizado el documental degustamos riquísimos bocadillos de la cocina de “El Balagán de Deli” de la mano de Isaac Capon. – Compositores judíos que han pasado por el único y exquisito mundo musical para llevarla al teatro y hacer un gigante como lo es Broadway. Este documental es por excelencia la vida de estos compositores judíos y sin perder la originalidad para cierto tipo de personas y hacerlo universal, a pesar de la idiosincrasia judía.
Estos judíos que tuvieron y tienen el poder de crear emociones a través de la música y sus letras y dar a conocer costumbres, tradiciones y puntos de vista a un número cada vez más amplio de espectadores… Como la mayoría lo sabrá y no es ninguna sorpresa el papel único que los judíos han tenido en la construcción del fascinante mundo llamado Broadway.
Recién viendo este documental caí en cuenta, del papel importante que tuvieron y de la participación que más allá de las letras, música, vestuarios y voces para transmitir a través del teatro vivencias de vida de “otros”. Considero que una buena obra musical es aquella que dura más allá de su tiempo en cartelera, es, la que permanece fuera del escenario del teatro; la que nos marca y la que traemos a la mente una y otra vez, que nos permite pensarla, analizarla o simplemente ver y escuchar para el deleite y disfrute…
En aquella época del siglo XX, las comunidades de judíos migrantes fueron elaborando y moldeando el Broadway que hoy conocemos. Casi de manera casual, estilos e instrumentos tradicionales de música judía, comenzaron a verse y a oírse en los escenarios de esa época; para luego mezclarse con la música de otras minorías que sentían y vivían la misma suerte de rechazo. Y en pocos años, fueron creciendo a un paso acelerado… De la música le siguieron las temáticas, los personajes, las preocupaciones de lo que ello conlleva ir creciendo a la par de lo cotidiano, sin olvidar contar la vida de los “otros”, para llevar a escena las historias vividas, enseñanzas y divertir al espectador. La presencia de estos judíos inicial, se ha convertido en un sello para casi todas las obras de teatro.
Si tuviera que hacer un recuento de todos ellos, temo olvidarme de uno… Imposible sería en enlistar los nombres, títulos que nacieron del talento y sentimiento de estos compositores. El legado judío en Broadway no es solo el trabajo teatral; es el repaso de la inconformidad, el talento para sobrevivir de muchos hombres y mujeres que encontraron en el teatro la manera de ganarse la vida y defender su lugar en el mundo. Jshbell Naymes”
Como bajo el calendario