En mis 13 años viviendo en Israel he tenido la experiencia de conocer a inmigrantes de ¡más de 80 países! Es común en escuchar muchos idiomas en un vagón del tren, en el autobús y en las reuniones familiares. A esto nos referimos en hebreo como “kibutz galuyot” que no se refiere al nombre de un kibbutz en la tierra de Israel, sino “la reunión de los exiliados”, o el regreso de los judíos a Israel desde todos los países del mundo, como lo prometieron los profetas de la Torá. Kibbutz Galuyot, es el cumplimiento de la profecía bíblica y continúa sin cesar en nuestros días. Según una encuesta social del gobierno de Israel realizada en el 2011 a israelíes mayores de 20 años, el 49% reporta el hebreo como lengua madre, 18% el árabe, 15% el ruso, 2% Yiddish, 2% francés, 2% inglés y el 1.6% de la población reporta el español como su idioma nativo.
Pero la llegada e integración a la tierra prometida no es únicamente miel sobre hojuelas. Los inmigrantes enfrentamos grandes desafíos. Los dos más apremiantes son aprendizaje del idioma hebreo y la inserción en el mercado laboral israelí. La ola de inmigración rusa ha mantenido el idioma y comunidades muy unidas, así como los franceses, los anglo parlantes y los etiopes. Sin embargo, he notado que los latinoamericanos (exceptuando a la comunidad Argentina que es la más numerosa y unida) que hemos logrado vencer la barrera del idioma y dominar el hebreo, nos vamos integrando a la comunidad local en la que vivimos y no necesariamente buscamos activamente establecer comunidad con otros inmigrantes de nuestro país de origen, salvo en algunas ciudades donde se concentran cantidades significativas de inmigrantes hispanohablantes como Ra’anana, Kfar Saba, Karmiel y recientemente Harish.
Aunque en el día a día una comunidad del país de origen no juegue un papel protagónico en la vida de los inmigrantes en Israel; el hecho de pertenecer a una colectividad que comparte rasgos culturales como el idioma y tradiciones, no sólo permite a los nuevos inmigrantes mantenerse en contacto con su país de origen sino que fortalece la diversidad de la nueva nación.
Así que motivada por una charla con Isidro Ortiz, encargado de la sección consular y asuntos culturales de la Embajada de México en Israel y con Shani Peled, sobre actividades futuras del capítulo local de la Red Global de Talentos Mexicanos, un grupo voluntario de mexicanos radicados varios años en el país y que apoya con información y conexiones sociales a mexicanos que llegan a Israel temporalmente para realizar posgrados, investigaciones académicas, pasantías o por trabajo, decidí que a finales de marzo, nos uniríamos a las celebraciones mundiales de los logros de las mujeres, con un evento para mujeres mexicanas en Israel.
El poder de la unidad latinoamericana
La cultura israelí es directa, poco protocolaria y eso fomenta networking a gran velocidad y que colaboración sea parte del día a día. Así que el evento se transformó rápidamente en una celebración no únicamente para las mexicanas del capítulo Israel de la Red Global de Talento Mexicano, sino una celebración para mujeres líderes de comunidades locales de habla hispana en el país, incluyendo madres, emprendedoras y parejas mixtas.
Un poco más de una veintena de mujeres originarias de nueve países latinoamericanos incluyendo Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela, nos reunimos para celebrarnos, compartir secretos del éxito y hacer networking para apoyar nuestros proyectos y emprendimientos.
Iniciamos con una sesión de flow de energía femenina guiada por Jessica Padan, originaria de Inglaterra y fundadora del Estudio de Yoga Tula, quien aunque tiene más de 15 años de haberse establecido en Israel, no dejó pasar la oportunidad de practicar un poco de español y mantenerse conectada con sus raíces latinoamericanas.
Unos minutos de yoga para encontrarnos completamente en el aquí y el ahora fueron suficientes para lograr respirar tranquilas en medio de un ambiente social y político muy complejo en Israel, y abrir nuestras mentes y corazones para escuchar al panel que moderé con tres grandes mujeres que compartieron tips para alcanzar el éxito bajo nuestros propios términos.
Izquierda a Derecha: Panelistas Abigail Herzl, Yael Izaki, Pamela JRamoy, Alejandra Barav Fotografía: Yifat Yerushalmi
Abigail Herzl, originaria de México, investigadora y maestra en Ciencias de la Nutrición de la Universidad de Ariel, con su gran sonrisa y actitud positiva, compartió la realidad, lo estresante, lo divertido y la importancia del manejo de expectativas en la vida cotidiana, según sus experiencias al establecer el primer laboratorio de lactancia de la universidad mientras cría cuatro niños menores de nueve años.
Yael Izaki, originaria de Uruguay, fundadora de la ONG Netta que fomenta la igualdad de representación de mujeres en los puestos de jerarquía y promueve una cultura organizacional que trate las cuestiones de género, compartió la importancia de trabajar con las organizaciones y no únicamente con las mujeres para lograr el éxito profesional. Yael recientemente publicó la versión en español de su libro Exitosa a tu Manera que presenta un concepto ampliado del éxito y lo obsequió y dedicó a cada una de las participantes en el evento.
Pamela JRamoy, originaria de Argentina, co-fundadora y CMO de la startup CropTimize, compartió las tres P’s que la ayudan a navegar su vida hacia el éxito: pasión, prioridades y plan. Como buena inversora en tecnología, resaltó lo crucial de establecer un esquema, términos y un plan de salida al invertir tu tiempo, dinero y conocimientos en cualquier proyecto en el que decidas involucrarte, incluyendo el matrimonio.
Y como el motivo era celebrar el Día Internacional de la Mujer, no podían faltar regalos. Así que invitamos al Shuk Rosa, comunidad de emprendedoras latinoamericanas fundada por Mariana Bravo y Mariana Salas, originarias de México, a participar en el evento con giveaways y descuentos para dar a conocer sus negocios. Así pudimos llevar a cabo una rifa de regalos entre los que participaron más de diez emprendimientos dirigidos por mujeres latinoamericanas en Israel.
Mariana Bravo graba un mensaje de agradecimiento a las emprendedoras de Shuk Rosa. Fotografía: Yifat Yerushalmi
Yael Manachem, originaria de Uruguay, ceramista y fundadora de Bellamika Ceramics, obsequió a cada una de las asistentes al evento un medallón cerámico con un mensaje inspirador con frases como “מלכה” reina en hebreo y “you go girl”.
Izquierda a Derecha: Shani Peled, Daniella Azulay, Keren Sztendel, Jessica Padan, Yael Menachem. Fotografía: Yifat Yerushalmi
Autoras como Miri Berger y Fanny Gonzalez, ambas originarias de México participaron en la rifa donando sus respectivos libros: The Ecosystem, una recolección sobre el ecosistema hi-tech israelí y La Estrella que pidió un deseo, en su versiones en hebreo y español.
Alejandra Shamorro, originaria de Colombia y creadora de Kinneret Jewelry, participó obsequiando una de sus piezas de joyería inspirada en la tierra de Israel.
Daniella Azulay, originaria de Brasil y dueña de la tienda La Frutteria, que comercializa productos latinoamericanos, regaló deliciosos alfajores Havana para endulzar a las participantes.
Otras emprendedoras obsequiaron servicios de cortesía como un taller de Mandalas por Emy Mandalas, una sesión de Healing por parte de Sandra Rymberg, una sesión virtual organización de espacios por Roma Deco, una sesión de consultoría en marketing por parte de Ana Lipnik, una así como descuentos en la Heladería Nova, que próximamente iniciará operaciones en Israel.
Finalizamos el evento con una gran noticia para los inmigrantes latinoamericanos en Israel. Patricia Ashkenazi, originaria de Perú, activista social y coach de integración social femenina en Israel, compartió que se abrió en la Knesset (Parlamento Israelí) un lobby latinoamericano. La primera actividad fue una reunión del grupo Mujeres en la Knesset con la diputada Pnina Tamano-Shata, ex-Ministra de Inmigración y Absorción y actualmente Jefa del Comité del Status de la Mujer en el Parlamento israelí.
La diputada Tamano-Shata es una mujer que conoce de cerca los desafíos de los inmigrantes en Israel. Es la primera mujer nacida en Etiopía en ingresar a la Knesset en 2013 y en el año 2020 se convirtió en la primera ministra nacida en Etiopía al ser nombrada Ministra de Inmigración y Absorción. Es un vivo ejemplo, de que con esfuerzo y perseverancia, todo es posible.
Durante la reunión la diputada nos invitó continuar presentando los mayores desafíos de las mujeres hispano hablantes según la investigación que actualmente realiza Patricia y dar seguimiento para buscar soluciones en conjunto con los ministerios adecuados y parlamentarios, que en su mayoría, están interesados en la integración exitosa de las mujeres inmigrantes por su rol central en el bienestar de familias enteras.
El evento fue un semillero de nuevas amistades, fuente de inspiración y regalos que son producto de nuestras propias manos y talentos. Aunque no estoy en comunicación con estas latinas talentosas en mi día a día, y aunque no conozco cada uno de sus países de origen, tenemos un idioma común, una nueva patria común, desafíos similares, y es una agasajo formar parte de esta comunidad, que en conjunto contribuyen a la sociedad y economía israelí cuatro libros, seis pequeños negocios, una startup, dos fondos de inversión, una ONG, un Laboratorio de Investigación, un Premio Internacional, más de 400K seguidores y miembros en sus comunidades en redes dentro y fuera de Israel, y por supuesto, la crianza de hijos y nietos.
La mentalidad de crecimiento y la tenacidad que veo en cada una de estas mujeres, me recuerda porque la presencia de los inmigrantes en Israel ha traído crecimiento económico, innovación cultural y florecimiento tecnológico sin precedentes.
Photo By: Yifat Yerushalmi
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