En una noche llena de emociones y teniendo como invitado de honor a Jorgito, esposo de la reconocida Shanik Berman ,los habitantes de “La Casa de los Famosos México” vivieron su segunda gala de eliminación, un momento cargado de tensiones mientras uno de ellos se despedía del ansiado premio de 4 millones de pesos.
A pesar de que para muchos la que pone la sal y lo picante dentro de una Casa de los Famosos , Shanik Berman fue la que resultó eliminada pese al gran esfuerzo realizado por su marido, su familia, sus fans y todos los miembros del TeamShanik
Tocó el turno de ir informando quién regresaba a la casa, ahi Shanik, mostró su lado más humano y tomó la mano de sus “rivales, uno a uno, Arath lo quiso hacer con Karime, pero esta ni por enterada, fue así que dieron el primer nombre: Arath, quien no pudo contener las lágrimas al escuchar la designación, después fue Karime. Finalmente, Shanik y Gala entraron a la puerta de eliminación, donde se reveló que la persona que abandona la competencia es la periodista y comunicóloga Shanik Berman.
Tras mucha expectación, salió eliminada Shanik Berman, quien reaccionó con tristeza y enojo.
Fue así que contra lo que muchos pensaban Shanik Berman fue eliminada de La Casa de los Famosos. Shanik se robó el corazón del público en las primeras semanas, debido a entrar acompañada de su Jorgito, un muñeco de peluche que representaba a su marido con la finalidad de no extrañarlo, pese a eso la conductora fue la elegida para dejar la competencia.
Tras salir, Shanik Berman tuvo la oportunidad de encarar a sus compañeros. Entre lágrimas, dijo que ella siempre quiso pertenecer al equipo Tierra y dijo que “odiaba” a Mario Bezares.
Por su parte, Jorge Berman, su marido, dijo que Shanik no pudo ganar a las envidias y roces generados al interior de la casa: Ni modo, el público decidió, le jugaron muy rudo adentro.
Mientras Shanik Berman lamento su salida y comentó a los micrófonos de Hoy que estaba desconsolada por su salida de La Casa de los Famosos y que en balde se prometió no llorar:
Supongo que si el público me quería fuera es porque no era tan interesante yo. Ahorita me juré: no voy a llorar, no voy a llorar, y salgo y me pongo a llorar.
Para su fortuna, la conductora tuvo un emotivo reencuentro con su marido, a quien tuvo que personificar con un peluche, para no extrañarlo demasiado en la casa.
Así la famosa casa se queda sin su sal y la pimienta y definitivamente quien le ponía sabor al programa
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