América Latina tiene que poner cuidado con la aparente ´ingenuidad´ con que Irán está penetrando en la región. Inicialmente parecía una campaña de hostigamiento contra Estados Unidos, pero está claro que, con la ayuda de células proiraníes, su presencia en la región “tiene otro motivo”.
Así lo advirtió Dorit Shavit, directora general para América Latina y el Caribe de la Cancillería israelí, durante su última visita a Panamá en febrero pasado.
“Hay que tener cuidado con estas relaciones. Irán tiene interés de exportar su revolución islámica a través de sus aliados en América Latina. Es importante abrir los ojos y los oídos para saber lo que está pasando”. Añadió: “Nadie puede decir hoy lo que puede pasar mañana con esta fuerte presencia de Irán en América Latina”.
ANTECEDENTE DE TERROR
Shavit indicó a este diario que la presencia iraní en América Latina, y su abierta intención de hacerle daño a Israel, quedó plenamente demostrada durante el sangriento atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), ocurrido el 18 de julio de 1994 en Buenos Aires, y que dejó 85 muertos y 300 heridos.
Wikipedia registra que el 25 de octubre de 2006, los fiscales Alberto Nisman y Marcelo Martínez Burgos acusaron formalmente al gobierno de Teherán de planificar el atentado y a Hizbulá de ejecutarlo. “Después de casi 20 años nadie ha sido juzgado ni detenido”, expresó la funcionaria.
El 25 de septiembre de 2007 el entonces presidente de Argentina Néstor Kirchner denunció ante la LXII Asamblea General de las Naciones Unidas que Irán no quería cooperar para esclarecer el atentado contra la AMIA. Afirmó que las campaña de Irán para promover el terrorismo internacional no conocen de tregua, y así se hizo evidente con los recientes (febrero pasado) atentados en Georgia y la India, que si bien es cierto no dejaron muertos, sí representan una amenaza real para Israel y sus aliados.
CABEZA DE PLAYA
En la década de 1980 fue cuando Irán comenzó a fortalecer su presencia en América Latina. Cuba fue el primer país en mantener relaciones con Irán. Posteriormente lo hicieron Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua. Semanas atrás Shavit reveló que el grupo islamista libanés Hizbulá tiene una célula en el departamento de La Guajira, al nordeste de la frontera entre Colombia y Venezuela.
El canciller venezolano negó entonces que su gobierno preste ayuda al grupo Hizbulá para atentar contra judíos venezolanos. En una opinión recogida por la agencia estatal de noticias ABN, Nicolás Maduro expresó: “Esta declaración de esta funcionaria (Shavit) creo que debe ser rechazada por la propia comunidad judía en nuestro país. Es muy peligrosa”.
Según Shavit, con su incursión en Latinoamérica Irán intenta salir del aislamiento internacional y encontrar vías para evadir las sanciones.
“La mayoría de los países de América Latina cumplen con las sanciones de la ONU sobre el programa nuclear de Irán. “Tengo mis dudas sobre si Venezuela lo hace”, agregó.
ALERTA
Un despacho noticioso de la agencia EFE reporta que el subcomité antiterrorista de la Cámara de Representantes de EU aprobó el viernes pasado “un proyecto de ley para exigir al Departamento de Estado estadounidense que informe al Congreso sobre las actividades de Irán en América Latina”.
El texto del proyecto presentado explica que “Irán ha duplicado su número de embajadas en Latinoamérica, y recuerda el atentado ocurrido en 1994 contra un centro judío en Buenos Aires en el que murieron 85 personas, y que fue presuntamente respaldado por Irán”. Se plantea la necesidad de investigar el supuesto complot iraní para asesinar al embajador de Arabia Saudí en Washington con la colaboración de carteles mexicanos.
ILEANA ROS-lEHTINEN: ´TOUR DE LOS TIRANOS´
La última gira del presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, por América Latina fue en enero pasado. Visitó Cuba, Nicaragua y Ecuador. En una noticia publicada por el diario El Universal de Venezuela, la presidenta del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Ileana Ros-Lehtinen, describió el viaje del líder iraní a la región como “el tour de los tiranos”. Por su lado, el sitio digital Perú21.Pe publicó que el presidente de Ecuador, Rafael Correa, consideraba un tema de soberanía nacional la decisión de recibir a su par iraní.
“No vamos a permitir que nadie, desde afuera, nos dicte qué vamos a hacer con nuestras relaciones internacionales”, afirmó Correa. Entretanto, el gobierno de Barack Obama restó relevancia a la gira de Ahmadineyad por América Latina y según un vocero de la Casa Blanca, Washington seguirá comprometido con sus vecinos para mantener el buen nivel de relaciones con los países de la región. El portavoz Jay Carney indicó que “ Washington está centrado en el compromiso con América del Sur y Central, que pretendemos que continúe a un nivel sólido”.
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