Utilizando una Simpática Expresión de Carlos Alazraki:
“¡La Regaste Grueso!”
Esta expresión la emitió el extraordinario, agudo y simpático pensado, Carlos Alkazraki, cuando escribió su Carta Semanal, dirigida en esa ocasión al Piojo Herrera.
Ahora, me permito aplicarla al Presidente del Partido de la Revolución Democrática, quien la semana pasada sometió a consideración la renuncia a su cargo; y eso es algo que se tiene que entender bien.
Esto anterior no significaba renunciar, ni nada por el estilo; sino simplemente anticipar que la mayoría de sus delegados y consejeros no iba a aprobar esa supuesta decisión, y ¡así no pasaría nada!
Un pequeño intermedio, para mencionar que en la carta que correspondió a Carlos Navarrete, en octubre del año pasado, Alazraki felicita a su “tocayo”, cuando tomó posesión del PRD, aconsejando que “se deslindara de los demás partidos de izquierda”…¡ajá!
Bueno, pues llegó el momento del V Pleno Extraordinario del IX Consejo Nacional, donde lo que más sobresalió –además de que Navarrete no renunció-, fue la decisión de que se privilegiarán las alianzas con los partidos de izquierda para las próximas elecciones locales en 12 entidades del país.
Además, se dejó la posibilidad de aliarse con el PAN, en casos muy específicos…nuevamente intentar mezclar agua con aceite.
¿Hacia adonde pretende ir la Izquierda!
Es patético que se haya dejado abierta la posibilidades de alianzas con el PAN.
Pero peor aún es que “privilegiar alianzas con los partidos políticos de izquierda”, incluye a MORENA.
Después de la insultada e intento de humillación que le propició Martí Batres a Carlos Navarrete, en el programa de López Dóriga, el día de las elecciones, esa posibilidad se antojaba entonces vergonzosa e indigna. Pero eso fue “entonces”, al parecer.
Ahora entiendo porqué surgen otros partidos. Ya después se desvían, y se asientan en zonas de confort de vil negocio familiar y/o grupal.
Seguramente, el PRD tiene gente fiel, personas, quienes creen en las causas de y por el pueblo.
La gente positiva se ha acercado y “amueganado”, con la salida de quienes entendían las llamadas causas sociales, como paros, demagogia barata y arenga.
Se trata de una verdadera posibilidad para que crezca este partido, bajo el paraguas del diálogo, la negociación, el razonamiento y la propuesta, haciendo a un lado amotinamientos incongruentes, como el de Reforma; o los grandes acarreados del “peje”, quien nunca ha querido explicar de donde saca recursos y de qué vive, además de los otrora donativos forzosos por parte de trabajadores del DF, cuando fue Jefe de Gobierno.
Puede ser el momento para que la gente de izquierda conforme un partido de inteligencia y no de choque.
Ambos personajes, tres y dos veces candidatos a la presidencia del país, sólo reflejan un partido sin bases, y más familiar que el mismo Verde. ¡Se fueron! ¡Déjenlos ir!
El PRD debe ser mucho más que el feudo de unos cuantos.
La madurez radica en entender que nadie es eterno, y que el tiempo cobra factura.
Esas alianzas no reflejan posición de ideología, sino simple y llana hambre de poder.
¡La Regaste Grueso!
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