La reconocida actriz y cineasta israelí Ronit Elkabetz (foto) falleció hoy, martes, a los 51 años, víctima de un cáncer.
Comenzó su carrera como modelo, pero encontró el éxito cinematográfico en 1990, con su primer papel protagónico en La prometida, y cuatro años después ganó el primero de sus tres premios Ophir, de la Academia del Cine Israelí, por Búsqueda.
Elkabetz también se destacó en Francia, donde actuó en varias películas y obras de teatro: en 1997 se mudó a París, donde estudió con Ariane Mnouchkine en su etapa vanguardista del conjunto Théâtre du Soleil, y en 2001 protagonizó el filme Origine contrôlée.
Tres años después escribió, dirigió y encabezó la película Tomar una esposa, un drama casi autobiográfico que inició una trilogía acerca del matrimonio infeliz de una mujer que continuó con Shivá (semana de duelo según el rito judío) y Gett (divorcio religioso). El juicio de Viviane Amsalem, en 2014.
“No sorprende que ella cautivara la atención del mundo: era amada por todos, era simplemente espectacular”, sintetizó el director Amos Gitai en una entrevista con la Radio del Ejército.
Para el ex presidente Shimon Peres, Elkabetz fue “un extraordinaria embajadora cultural”, que “en los diversos escenarios del mundo representaba a los ciudadanos y al Estado de Israel con gran orgullo, creatividad y belleza”, gracias a “una personalidad especial, que combinaba con su firma única el talento para escribir con la actuación”.
Su ataúd se exhibirá al público mañana, miércoles, de 11 a 13 hs., en el teatro de la Cinemateca de Tel Aviv, y el funeral se llevará a cabo a las 15, en el cementerio Kiriat Shaul de esta ciudad.
Nacida en Beer Sheva en 1964, de padres de ascendencia marroquí, Ronit era la mayor de cuatro hermanos.
La sobreviven su esposo y sus hijos mellizos, de 3 años.
Z“L