Para este acto se invitó a Judith Butler, académica estadounidense de la Universidad de California, Berkeley, quién durante años realizó llamados a boicotear al Estado de Israel y esta no fue una excepción.
En este evento asistieron al menos 700 personas y aplaudieron las palabras de la cuestionada oradora que comentó que “el boicot, las sanciones y la desinversión son una forma resistencia no violenta” contra el Estado que posee la única democracia en Medio Oriente. Como si fuera poco, el 11 de septiembre, fecha emblemática, se nombró en Frankfurt a Butler con el prestigioso premio Theodor Adorno en el campo de las humanidades.
Desde Jerusalem, capital del Estado Judío, se cuestionó duramente a las autoridades del museo por dicha invitación.
Por otro lado el profesor Gerald Steinberg, director de la ONG Monitor, calificó fuertemente al Museo Judío de Berlín como el “Museo anti-judío de Berlín” y tildó a la académica estadounidense de apoyar a los grupos terroristas Hamas y Hezbollah, que “explícitamente buscan la destrucción de Israel, lo que representa la antítesis de los principios universales de derechos humanos adoptados a la sombra del Holocausto”.
Artículos Relacionados: