Ahora, el apoyo al gobierno terrorista de Hamas en Gaza, toma nueva forma de provocación: Aero-flotilla. El portavoz policial, Mickey Rosenfeld indicó que Israel desplegará cientos de policías en y alrededor del Aeropuerto Internacional Ben Gurión de cara a la llegada masiva de activistas provenientes de Francia, Bélgica, Gran Bretaña, Alemania, Italia y EEUU,.
Ellos afirman que tendrán una semana de actividades culturales y políticas en las ciudades de Ramallah, Belén, Hebrón, Jenín, Jerusalén y las comunidades palestinas del Valle del Jordán. Segun Mickey Rosenfeld los activistas internacionales pro-palestinos serán deportados. Los agentes israelis ocuparán sus puestos con el objetivo de “impedir cualquier alteración” y “asegurarse de que no habrá provocaciones” por parte de “extremistas”. Tanto la Policía como la Policía de Fronteras desmintieron haber desplegado ya en el aeropuerto un número de agentes por encima del habitual. Se habla de decenas de efectivos de ambos cuerpos en Ben Gurión preparándose para la llegada el próximo viernes de los activistas, que los organizadores cifran estimada de entre 600 (350 de ellos franceses) y 1,200.
El centro de operaciones de la policía incluirá también representantes de la oficina del primer ministro, que supervisa a los servicios secretos en el interior; y de los Ministerios de Interior, a cargo del control de pasaportes; Economía, responsable de aduanas; y Transporte, que supervisa a la autoridad aeroportuaria. El objetivo es retener a los activistas en cuanto lleguen al control de pasaportes, antes de que alcancen la terminal central, donde estarán los periodistas, para lo que examinarán minuciosamente las listas de pasajeros y las compararán con los archivos de los servicios de inteligencia. Los agentes han recibido indicaciones sobre dónde situarse para detectar los primeros pasajeros que lleguen desde Europa. Antes de partir hacia Rumanía, el primer ministro, Biniamín Netanyahu, mantuvo un encuentro de coordinación en el aeropuerto con los servicios de seguridad, a los que ordenó actuar con determinación para impedir desórdenes. “Todos los países tienen el derecho de impedir la entrada de provocadores en sus fronteras”, afirmó. La iniciativa, bautizada “Bienvenidos a Palestina”, complementaria a la flotilla a Gaza, tiene como objetivo participar en eventos anti-israelíes tanto en los territorios palestinos, en el Aeropuerto Ben Gurión y en el sur de Israel.
Aunque los organizadores dicen que vienen a “mostrar que hay hombres y mujeres de todos los países que están dispuestos a aportar su apoyo moral” a la población palestina, que se encuentra “bajo ocupación desde hace demasiado tiempo” y por cuya suerte “no parecen interesarse” los gobiernos occidentales. Los activistas, provenientes de Francia, Bélgica, Gran Bretaña, Alemania, Italia y EEUU, afirman que tendrán una semana de actividades culturales y políticas en las ciudades de Ramallah, Belén, Hebrón, Jenín, Jerusalén y las comunidades palestinas del Valle del Jordán. Al ingresar al aeropuerto de Ben Gurión piensan declarar que viajan a “Palestina”. Los organizadores insisten en que no vienen a “meter cizaña en Tel Aviv”, sino a “visitar familias palestinas, compartir su día a día durante una semana, visitar las ciudades, pueblos y campos de refugiados, así como descubrir las dificultades de sus habitantes, su cultura y sus anhelos”.
Artículos Relacionados: