La Policía de Israel y la Municipalidad de Tel Aviv declararon el estado de máxima alerta en la ciudad por la presencia de un posible terrorista en sus calles.
Cientos de agentes han establecido controles en todos sus accesos y se han desplegado por los principales cruces tras recibir los servicios secretos una alerta inminente, señala el diario Yediot Aharonot.
La Municipalidad de Tel Aviv comunicó que “el refuerzo de agentes sigue a las evaluaciones de la Policía”, y que se presta particular atención a centros escolares y guarderías infantiles.
Los agentes, muchos con las armas desenfundadas, revisan cada vehículo que entra a la urbe y a transeúntes, requiriéndoles la identificación y en algunos casos hasta abriéndoles los bolsos.
La alerta, que afecta también a otras localidades alrededor de Tel Aviv, se produce una semana después exactamente de que tres israelíes fueran asesinados a tiros en esa misma ciudad, dos de ellos en un pub y un tercero, taxista, en el norte.
El atacante, presuntamente identificado con movimientos jihadistas, se dio a la fuga y los servicios de seguridad le han perdido el rastro.
En relación con ese ataque la Policía impuso un severo cordón de seguridad alrededor de la población de Arara, en Galilea y donde vivía el atacante, Nashat Melhem, cuyo rostro fue filmado por una cámara de seguridad de un pequeño supermercado segundos antes de abrir fuego.
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