Una ráfaga de diez cohetes lanzados desde el Líbano impactó esta tarde en la ciudad de Nahariya, cobrándose la vida de dos hombres: Ziv Belfer, de 52 años, y Shimon Nejam, de 54 años. Uno de los proyectiles cayó directamente en un edificio ubicado en el norte de la ciudad, causando graves daños. A pesar de los esfuerzos de los equipos médicos, ambos hombres fueron declarados muertos tras recibir maniobras de reanimación cardiopulmonar.
Ziv Belfer, propietario del popular café Toki-Tok en el Centro Horev de Haifa, era una figura conocida en la región. Shimon Nejam, excombatiente de las Fuerzas del Sur del Líbano (SDF), había residido en Nahariya desde la retirada de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) del Líbano. Ambos hombres eran miembros activos y respetados de sus comunidades.
El municipio de Nahariya expresó su dolor por la tragedia. “En nombre del alcalde, el concejo municipal y todos los vecinos de la ciudad, enviamos nuestras más sentidas condolencias a las familias”, señalaron en un comunicado. Las fechas del funeral aún no han sido confirmadas.
Los servicios de emergencia llegaron rápidamente al lugar del impacto. Dor Vaknin, médico de Magen David Adom (MDA), describió la escena como devastadora: “Encontramos una estructura severamente dañada por el impacto del cohete, con un incendio activo. A pesar de nuestros esfuerzos, las heridas de los afectados eran demasiado graves para salvar sus vidas”.
Mientras tanto, bomberos de la estación de Zebulon continúan trabajando para extinguir el incendio provocado por el ataque.
La Policía de Israel pidió a la población mantenerse alejada del lugar del impacto y no tocar restos de cohetes, ya que podrían contener explosivos. Se recomienda informar de inmediato cualquier hallazgo llamando al número de emergencia 100. “Seguir las instrucciones puede salvar vidas”, recalcaron las autoridades.
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