El gobierno de Australia anunció el martes que ya no reconoce a Jerusalén Oeste como la capital de Israel, revocando una controvertida decisión del anterior ejecutivo conservador.
La ministra de Relaciones Exteriores, Penny Wong, dijo en un comunicado que el estatus de la ciudad debe resolverse “como parte de cualquier negociación de paz entre Israel y el pueblo palestino” y no a través de decisiones unilaterales.
La Autoridad Palestina saludó decisión de Australia sobre estatuto de Jerusalén mientras que Israel criticó la decisión del gobierno australiano.
“No respaldaremos ningún enfoque que socave esta perspectiva”, dijo la ministra del gobierno de centro-izquierda de Anthony Albanese, llegado al poder en mayo de 2022.
Wong también indicó que “la embajada de Australia siempre ha estado y continúa en Tel Aviv”.
El anterior ejecutivo liderado por Scott Morrison emuló en 2018 al entonces presidente estadounidense Donald Trump y reconoció Jerusalén Oeste como capital de Israel, una decisión muy criticada en Australia.
“Sé que esto ha causado conflicto y angustia en parte de la comunidad australiana y hoy el gobierno busca resolver esto”, dijo Wong el martes.
UNA CIUDAD DISPUTADA
La mayoría de países del mundo evitan situar sus embajadas en Jerusalén, reivindicada por israelíes y palestinos, para no condicionar el resultado de un eventual proceso de paz entre ambos bandos.
Israel ocupó Jerusalén Este en 1967 en la guerra de los Seis Días y luego la anexó, declarando la ciudad como su “eterna e indivisible capital”.
Los palestinos reivindican la parte este de la ciudad como capital de un futuro Estado.
Wong dijo que la decisión no pretendía ser hostil hacia Israel.
“Australia siempre será un aliado firme de Israel. Fuimos de los primeros países en reconocer formalmente a Israel”, defendió.
“No vamos a vacilar en nuestro apoyo a Israel y la comunidad judía en Australia. Tampoco vacilaremos en nuestro apoyo al pueblo palestino, incluida ayuda humanitaria”, añadió.
Antes de anunciar oficialmente la decisión, el departamento de Relaciones Exteriores y Comercio de Australia había retirado en su web una referencia a Jerusalén Oeste como capital de Israel.
Aunque fuera previsible, la decisión puede causar malestar en Israel, según Ran Porat, historiador e investigador en la Universidad Monash de Melbourne.
“En Oriente Medio, el simbolismo en general está en el centro de muchos conflictos. El simbolismo no es desdeñable, no carece de importancia”, dijo.
La oposición israelí de Likud, liderado por el ex primer ministro Benjamin Netanyahu, puede hacer uso de este movimiento para poner en evidencia al gobierno de Yair Lapid de cara a las elecciones del 1 de noviembre, opinó.
ISRAEL CRITICA DECISIÓN DE AUSTRALIA
El primer ministro israelí, Yair Lapid, criticó duramente la decisión de Australia de dejar de reconocer Jerusalén Oeste como la capital del país, revirtiendo una postura adoptada por el anterior gobierno de derecha.
Lapid describió la decisión como “precipitada” y agregó: “Lo único que podemos esperar es que el gobierno australiano gestione otros asuntos con más seriedad y profesionalidad”.
Banal, antiguo antijudaísmo. Cuando Australia deicidó ser un paíb independiente, lo hizo como acto soberano, como Israel con respetco a su histórica capital, judía. En un país donde el 20% es árabe, con plenos derechos… rodeado por dictaduras donde ser judío no solo es peligroso sino imposible.
Con todo respeto, pero que autoridad tiene Australia para decir que no reconoce a Jerusalén oeste como la capital de Israel, por más que hablen de ayuda, etc. No les corresponde a ellos ni a nadie reconocer o no una decisión que Dios lo ha determinado.
¿ Una decisión que Dios lo ha determinado?
Si Australia se siente con la autoridad de no reconocer a Yahrulashain oeste como capital de Israel, también que se opongan a la invasión risa en Ucrania que les han usurpado provincias completas, ahí, no dicen nada, Rusia los puede invadir, Israel siempre vivirá.