Coincidiendo con la muerte del espía israelí en territorio sirio terminó este domingo la serie transmitida por la televisión pública de Israel “Lojem 566” (en hebreo Combatiente 566, o para dar una traducción menos literal pero más acorde al contexto, Agente 566) en la que se conocieron nuevos datos sobre la vida del espía Eli Cohen, el israelí que logró infiltrarse en las altas esferas de poder del Gobierno de Damasco, en Siria, a través de las declaraciones brindadas por el israelí al Poder Judicial sirio.
El documental presenta la novedad a raíz de archivos que provienen del proceso judicial que se llevó en contra de Cohen, y en la nueva serie se puede escuchar dramatizadas sus declaraciones a la justicia siria y también apreciar desde otra perspectiva sobre por qué fue capturado el agente de inteligencia.
Los documentos difundidos por primera vez en la serie fueron traducidos del árabe al hebreo y estuvieron en los archivos secretos de la inteligencia israelí.
En su testimonio a los jueces sirios, Cohen brindó detalles sobre su historial de vida desde que emigró a Israel, (nació en Alexandria, Egipto), y de cómo fue reclutado para el Mossad y sobre cómo fue su proceso para terminar infiltrado en las altas esferas de poder de Damasco.
Se puede apreciar además en raras imágenes de archivo las últimas imágenes con vida y grabaciones con su voz, imágenes de la Ciudad de Buenos Aires en esos años, sitios que recorrió y a su esposa, hija y nieto conociendo los ambientes en donde se hospedó Eli Cohen.
Además testimonios de familiares, personal del Mossad que compartió servicio con Cohen, y del agente que recibió las últimas transmisiones secretas que Eli envió desde Damasco antes de ser descubierto por la inteligencia secreta siria.
Desde el Mossad sostienen hasta el día de hoy que la exposición, captura y posterior condena a muerte se debe a descuidos por parte de Cohen, pero según el documental no se puede descartar del todo que un “topo” en los servicios de inteligencia israelí haya filtrado la identidad del espía a los sirios. Cabe destacar, que en el mismo mes que cayó Eli, en Egipto también fue arrestado Wolfgang Lotz, alemán que espió para Israel. Su verdadero nombre fue Zeev Gor Arieh.
Familiares de Eli Cohen creen que el Estado de Israel esquivó su responsabilidad por la operación y la captura y refuerzan la teoría de que Cohen, el héroe nacional, fue explotado y abandonado por las autoridades de inteligencia del país.
En la serie se escuchan grabaciones de quien se desempeñara como jefe del Mossad en ese entonces, Meir Amit, explicando luego de la captura de Cohen: “No cometimos errores con Eli Cohen”. “Fue capturado porque se tuvo exceso de confianza. Hubo fallas, pero hubo un mínimo de errores”, añadió.
La hija de Eli Cohen, Sofi Ben Dor, tenía cinco años cuando su padre fue colgado en una plaza pública de Damasco y expresó fuertes críticas contra el Mossad.
“Sentí siempre que el Estado puso en Eli, sus propios errores. Es muy molesto escuchar a Meir hablando así ¿Hasta dónde me va a mandar el país, se van a aprovechar de mí, y qué va a suceder después de mi muerte? ¿Qué hay detrás de la elección de hacerlo ver como un héroe?, ellos quisieron usarlo hasta el final”, indicó Ben Dor.
También aparece Natan Solomon, quien fuera el instructor de Eli Cohen, en el Mossad. “Fue muy difícil reclutarlo”, explicó. “No estaba listo, entonces le hicieron una prueba. Se ocuparon de que lo despidan de su trabajo, para que así haya cierta presión sobre él. Luego, después de tres reuniones, lograron reclutarlo”, contó.
Nadia Cohen, su esposa, relató que la última vez que Eli estuvo en Israel, previo a partir para Damasco ya sabía, o temía, por su destino. “Eli murió aquí un mes y medio antes de que partiera de casa. Sabía que no iba a volver. Se despidió de nosotros. Además de haberlo matado a él, lo hicieron también conmigo. También los hijos pagaron el precio”, expresó.
Nadia contó que “minuto a minuto, y hora a hora”, siente estos sentimientos. “Todavía no nos habíamos formado como pareja y como padres de nuestros hijos”.
Kamel Amin Thaabet fue un importante funcionario en las altas esferas de poder en Damasco entre los años 1962 y 65. Solo que en realidad, su verdadera identidad era secreta y su nombre real era Eli Cohen. Logró infiltrarse en poco tiempo en importantes puntos en el Gobierno y transmitir información esencial para la seguridad del Estado de Israel que fue crucial para la victoria de la Guerra de los Seis Días que tuvo lugar en 1967.
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