Un funcionario israelí con contactos con el Gobierno de Estados Unidos manifestó que Washington le dio a Europa luz verde para reprender a los embajadores israelíes por los nuevos planes de construcción en los asentamientos, según un reporte del diario Yediot Aharonot.
“La actitud europea es esencialmente una acción norteamericana”, dijo un funcionario. “Los ingleses le preguntaron a los estadounidenses sobre cómo reaccionar”.
La cancillería teme que Europa recurra a nuevas acciones punitivas contra Israel por la decisión de extender la construcción en el controversial corredor E1 entre Jerusalén y Maalé Adumim.
Además, Londres ha dejado filtrar que podría suspender sus acuerdos comerciales con Jerusalén.
Israel anunció la construcción de tres mil nuevas viviendas en Jerusalén Este y Cisjordania. Pero la decisión de construir en el corredor E1 enfureció a EEUU y Europa.
Mientras tanto, Australia anunció que convocaba al embajador de Israel para regañarlo por la acción del Gobierno del primer ministro, Biniamín Netanyahu.
“Australia se opone desde hace mucho tiempo a toda la actividad en los asentamientos”, declaró el ministro de Exteriores de Bob Carr, tras reunirse con el embajador israelí Yuval Rotem.
“Dicha actividad amenaza la viabilidad de una solución de dos estados, sin la cual nunca habrá seguridad en Israel”. Carr expresó que la reacción israelí complica la posibilidad de reanudar las negociaciones entre ambos países. “Estoy extremadamente decepcionado con la decisión israelí”, expuso el jefe de la diplomacia australiana.
“Los norteamericanos y los británicos creen que la construcción en la zona E1 terminará con el proceso de paz”, explicó el oficial israelí al Yediot Aharonot.
Gran Bretaña, Francia, España, Suecia y Dinamarca convocaron a los embajadores israelíes en sus capitales para expresarles su profunda oposición al nuevo plan de viviendas.
“Los europeos recibieron luz verde para responder con medidas extremas; mientras que Washington resolvió no imponer ninguna sanción a los palestinos por su iniciativa en la ONU”, destacó el funcionario. “Los norteamericanos han decidido vigorizar a Abú Mazen (nombre de guerra del presidente palestino, Mahmud Abás) y presionar para que se reanuden las conversaciones de paz”.
La Oficina del Primer Ministro anunció que Israel continuará defendiendo sus intereses vitales “incluso frente a la presión internacional. La decisión no cambiará”. El comunicado agrega que “si los palestinos siguen actuando unilateralmente – Israel responderá en correspondencia”.
La semana que viene la Comisión de Planeamiento y Construcción de Jerusalén discutirá un nuevo plan para la construcción de otras 1.600 viviendas en el barrio de Ramat Shlomo de la capital – un proyecto que había sido congelado durante la visita del vicepresidente Biden al país en 2010.
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