La comunidad judía de Venezuela sigue con atención el desarrollo de los últimos días de campaña con miras a las elecciones presidenciales del próximo domingo en las que Hugo Chávez buscará acceder a un nuevo período mientras que el opositor Henrique Capriles intentará llegar al Palacio de Miraflores.
Sammy Eppel, analista político y director de la Comisión de Derechos Humanos de la B’nai B’rith de Venezuela, aseguró, en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN), que la campaña y el proceso eleccionario se desarrollaron “normalmente” y destacó la importante manifestación que encabezó Capriles el domingo pasado en la que se estimó que participaron “dos millones de personas”.
“La ciudad estuvo totalmente cerrada. Había muchísima gente y la verdad todo se realizó con bastante tranquilidad”, resaltó.
Eppel indicó que “el único incidente se dio en el estado de Barinas, donde un grupo de afectos al gobierno atacó a seguidores de Capriles y hubo muertos y varios heridos. Hay grabaciones y fotografías y fue obvio que fueron partidarios de Chávez quienes dispararon, pero el tema está en manos judiciales”.
Por este hecho fueron detenidas dos personas acusadas de haber asesinado a dos dirigentes opositores al gobierno de Chávez, pero en las últimas horas fueron liberadas.
En cuanto a la participación de la comunidad judía en este proceso eleccionario, Eppel comentó que “la comunidad se ha mantenido al margen de la campaña”, aunque aclaró que esto “no quiere decir que individuales hayan colaborado de un lado o de otro, pero eso no le compete a la comunidad”.
“Para la comunidad, las elecciones son importantes porque está en juego la tranquilidad del país, el futuro del país como tal, y las alternativas que se presentan son diferentes. Chávez y Capriles son dos escenarios diferentes”, señaló.
No obstante, Eppel aclaró que tanto una como otra alternativa genera preocupación. “Es un poco prematuro hablar de hechos concretos. El único hecho concreto y del cual asumo responsabilidad es que por lo menos el grupo internacional de la campaña de Capriles habla de retomar las relaciones con Israel como una cuestión normal de restablecimiento de relaciones con otros países”, agregó.
Venezuela mantiene interrumpidas las relaciones con Israel desde enero de 2009 cuando expulsó al embajador israelí Shlomo Cohen y a otros miembros de la delegación diplomática en rechazó a la denominada operación Plomo Fundido, cuando el Ejército hebreo avanzó sobre la Franja de Gaza en respuesta a los reiterados ataques con misiles por parte de los terroristas palestinos.
Eppel aclaró que hasta el momento, el candidato opositor no realizó una declaración pública, pero desde su entorno se dejó trascender la intención de retomar las relaciones con aquellos países con que se interrumpieron los vínculos.
Respecto de cómo afectó a la comunidad judía de Venezuela la ruptura de las relaciones con Israel, Eppel explicó que este hecho provocó problemas en la entrega de la visa para los ciudadanos israelíes que quieren visitar el país caribeño.
“Los que han podido viajar a Venezuela son aquellos que tienen otra nacionalidad, pero a los que sólo tienen nacionalidad israelí se les ha sido difícil e imposible conseguir una visa”, comentó el dirigente.
En cuanto a la relación del Gobierno de Hugo Chávez con la comunidad judía, Eppel indicó que se mantuvo “igual que en los últimos años”.
“No son unas relaciones fluidas, y existe mucha agresividad de parte de los medios de comunicación del gobierno hacia Israel, el sionismo y los judíos. Esa agresividad no ha cambiado”, aseguró Eppel.
El dirigente señaló que la relación entre el gobierno y la comunidad se sigue canalizando a través del canciller Nicolás Maduro. “Es una relación que diría que es normal, hay comunicación”, añadió.
Eppel aclaró que los ataques desde los medios oficiales “se redujeron en algún porcentaje”, pero advirtió que “siguen de manera diaria”. “Todos los días un medio de comunicación del gobierno o simpatizante del gobierno, que es parte de la llamada hegemonía comunicacional, tiene algunos detalles relacionados con (la crisis en) Siria que se tergiversa diciendo que hay una gran intervención del Estado sionista y del peligro sionista que existe en Venezuela”, puntualizó.
“Es un mensaje bastante claro, agresivo, y lo que es difícil es acostumbrarse. Dudo que eso cambie en el caso de que Chávez continúe en el poder”, consideró.
Sobre las estadísticas de aliá, Eppel señaló que si bien es un tema que se mantuvo se redujo el número de judíos que decide emigrar a Israel.
“No sabemos que puede pasar luego de las elecciones, no sabemos si el modelo que Chávez propone para el país pueda tener algún efecto en la intención de la comunidad”, dijo Eppel.
El próximo domingo en las elecciones, los venezolanos elegirán al gobernante que dirigirá el país entre 2013 y 2019.
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