A partir del pedido palestino de reconocimiento por parte de la Corte Internacional de La Haya, el gobierno en Washington aclara que, de acuerdo a su postura, la Corte Internacional debe rechazar el pedido de la Autoridad de hacer regir sobre ella su autoridad legal.
La vocera del Departamento de Estado, Jean Saki, dijo: “Estados Unidos no presume que el Estado de Palestina merezca ser llamado “Estado soberano”. No lo reconoce como tal, y no cree que sea apto para cumplir con el Tratado de Roma (es decir la autoridad de la Corte Internacional de La Haya); dijo Saki. Se refirió a la declaración del Secretario General de la ONU; Ban Ki Moon según la cual, a principios de abril, la Corte autorizará el pedido. Según Saki, se trata, solo, de “Una declaración administrativa según la cual obtuvieron los formularios, dado que el Secretario General no cuenta con atribuciones legales”. Y agregó: “Sobre ese tema, el despacho del Secretario General podría haber elegido una versión que aclare las cosas de un modo más firme”.
El miércoles, el Secretario General de la ONU, Ban ki Moon, anunció que los palestinos se adherirían a la Corte Penal Internacional de La Haya el 1° de abril. En la declaración, difundida en el sitio de internet de la ONU, se trasmite que “La ley entrará en vigencia para el Estado de Palestina, el 1° de abril de 2015”. Así, los palestinos podrán demandar a Israel por delitos que, en su opinión, perpetra en Judea y Samaria.
A principios de semana, la Autoridad Palestina fue aceptada, como observadora, en la Corte de la Haya. Los países miembros de la Corte votaron a favor de la incorporación de la Autoridad. Se trata solo de una victoria simbólica dado que, en esta etapa, los palestinos no pueden demandar a Israel pero la medida los acerca a la situación en la que podrán presentar las demandas ante la Corte por delitos que, a su juicio, cometen en Judea y Samaria.
Los palestinos creen que se trata de otro procedimiento en vías al reconocimiento del Estado palestino; un paso que cobró impulso recientemente con la declaración de algunos parlamentos en Europa –Francia, España y Suecia- sobre el reconocimiento del Estado palestino.
En Israel están convencidos que la Corte no cuenta con atribuciones para juzgar el pedido palestino dado que, la Autoridad Palestina, no es un Estado e Israel propiamente no ratificó el Tratado de Roma, que constituye el fundamento legal por fuerza del cual, funciona la Corte.
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