En un poderoso encuentro, la ex rehén israelí Moran Stella Yanai se enfrentó al líder del campamento de la UCLA, Aidan Doyle, quien previamente había elogiado la masacre del 7 de octubre. Yanai, quien fue secuestrada y retenida por 13 terroristas de Hamás durante el ataque, contó con valentía su terrible experiencia, hablando directamente con Doyle mientras él evitaba el contacto visual. Su voz reflejaba el dolor de su experiencia traumática mientras lo llamaba a reflexionar sobre sus declaraciones.
Moran Yanai describió los horrores que presenció y soportó diciendo: “¿Saben cuántos cadáveres vi? ¿Saben cuánta violencia sufrieron contra mí?”. Sus palabras pintaron un vívido retrato de la brutal violencia que enfrentó, enfatizando que el ataque había tenido como objetivo a civiles inocentes que simplemente se habían reunido para bailar. Su testimonio fue un desafío directo a los elogios previos de Doyle a la masacre, poniendo en primer plano el costo humano del evento.
En su confrontación, Yanai apeló a la humanidad de Doyle y le preguntó: “Te pregunto, como persona, ¿apoyas estas acciones?”. Su pregunta, simple pero profunda, expuso las implicaciones morales de su postura, dejándolo visiblemente incómodo.
Sí, hay pájaros y pajarracos.
esse Doyle é um rabichola danado, não foi a irmã dele a sequestra, se é que tem irmã!
Aun no me cabe en la cabeza entender la maldad inconcebible que algunos millones de humanos pueden vivir para odiar a otros seres humanos