El régimen del presidente, Bashar Asad, tiene planes de usar armas químicas contra su propio pueblo e incluso transferirlas al grupo terrorista libanés chií Hezbollah, afirmó el ex jefe de los arsenales químicos de Siria, teniente general Adnan Sillu, al periódico británico The Times.
Sillu, que desertó y huyó a Turquía hace tres meses, afirmó al rotativo que participó en reuniones de alto nivel con altas personalidades del gobierno para discutir el empleo de agentes químicos contra los combatientes rebeldes y los civiles que los apoyan en Alepo, la segunda ciudad más grande de ese país.
“Mantuvimos una seria discusión sobre el uso de armas químicas, incluyendo la forma en la que se las utilizaría y en qué áreas. Hablamos de esto como una última instancia – por ejemplo, si el régimen perdía el control de un área importante como Alepo”, expresó el general Sillu a The Times.
El general aseveró que la reunión, que se celebró en un centro de armas químicas a pocos kilómetros al sur de Damasco, fue para el alto oficial la “última
gota que rebalsó el vaso”. Sillu sostuvo que desertó porque estaba convencido de que el régimen eventualmente utilizaría las armas contra la población civil.
El general añadió que los altos mandos sirios “querían colocar ojivas con armas químicas en misiles – para transferirlas esta manera de Hezbollah. Para ser usadas contra Israel, por supuesto”, indicó.
En el pasado, añadió, el miedo a las repercusiones internacionales había disuadido al régimen acerca de la transferencia de parte de su arsenal de armas químicas a sus aliados en la región. “Ahora, si no tienen nada que perder, ¿por qué no compartir estas armas? Si comienza una guerra entre Hezbollah e Israel, eso sólo será bueno para Siria”, declaró el general Sillu al diario británico.
El ex alto mando precisó que los miembros de la Guardia Revolucionaria de Irán participaron en numerosas reuniones en Damasco y en una base militar cerca de la ciudad sureña de Daraa. “Siempre venían a visitar y aconsejar. Ellos siempre enviaban a sus científicos y se llevaban a los nuestros con ellos”, dijo al rotativo londinense. “Ellos estuvieron involucrados también en el aspecto político de cómo utilizar las armas químicas”.
Se estima que Siria tiene uno de los arsenales de armas químicas más grandes del mundo.
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