Soldados de Bielorrusia han desenterrado los restos de alrededor de 600 judíos asesinados por nazis, durante la Segunda Guerra Mundial.
De acuerdo con Anna Kondak, funcionaria de la ciudad de Brest, habría más de mil cuerpos, víctimas procedentes del ghetto (distritos urbanos en los cuales los alemanes forzaron a la población judía a vivir en condiciones miserables) judío local, el cual se mantuvo de 1941 a 1942.
El descubrimiento de la fosa común ocurrió durante las excavaciones de un terreno que se convertirá en un lujoso complejo residencial con centro comercial.
Las obras estarán suspendidas mientras dure el desentierro de las víctimas del holocausto, que avanza a 40 personas por día.
“No permitiremos la construcción de nada en los huesos de las personas”, sentenció el gobernador Alexander Rogachuk.
Medios locales señalan que los restos pertenecen a hombres, mujeres y niños, con una herida de bala en el cráneo, uno de los métodos utilizados por las fuerzas de Hitler para el ‘exterminio’, ya que también asesinaban personas en cámaras de gas.
El gobernador Rogachuk se reunió con representantes de la comunidad judía en Brest para trasladar los restos al cementerio Severnoe, pidiendo la comunidad respetar su tradición de re-entierros.
Además, se creó una petición, hasta ahora firmada por 492 personas, para cancelar el complejo residencial y en su lugar crear un parque conmemorativo para las víctimas.
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