El principal candidato opositor dijo el martes que el presidente Evo Morales busca implantar en Bolivia un estado “totalitario” y una “democracia del terror” si gana las elecciones del 6 de diciembre, como anticipan las encuestas.
En un encuentro con corresponsales el candidato derechista Manfred Reyes Villa dijo que lo que está en juego en los comicios “es un proyecto totalitario que no respeta la institucionalidad frente a un modelo progresista que busca la recuperación de la república y la seguridad jurídica”.
Según el ex gobernador de Cochabamba la política estatista de Morales responde a un “modelo anacrónico” así como la “justicia comunitaria” que en su criterio aumentará los “linchamientos” de delincuentes sospechosos que son sorprendidos en el acto por la misma gente.
Reyes Villa acusó al partido de Morales de buscar su destitución violenta a principios de 2007 cuando sus partidarios saquearon e incendiaron la gobernación en Cochabamba. La poblada estaba “encabezada por la actual ministra de Justicia, Celima Torrico”, dijo el candidato.
Reyes Villa recibió una orden de arraigo hace tres semanas por procesos en su contra cuando era gobernador de esa región. El martes aseguró que el gobierno esperó a que se acercaran las elecciones para influir en la decisión de los fiscales.
“Hay una mala fe y sometimiento de algunos miembros del Poder Judicial porque es incierta la seguridad jurídica del país cuando pudieron haberme proceso el momento en dejé el cargo”, acotó.
“Es un estado que no respeta la institucionalidad, no hay Tribunal Constitucional, la Corte Suprema está destrozada. Es un proyecto totalitario”, añadió.
Reyes Villa calificó a su acompañante de fórmula Leopoldo Fernández de “secuestrado político”. “Esa es la persecución política”, advirtió.
Fernández está detenido preventivamente en un penal de La Paz desde hace trece meses acusado de alentar un enfrentamiento que derivó en la muerte de 15 personas, la mayoría campesinos leales a Morales durante una ola de protestas antigubernamentales en septiembre del año pasado.
Según una última encuesta el candidato derechista figura en segundo lugar de las preferencias electorales con 18%, frente a 54% de Morales.
Fuente:El Nuevo Herald
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