El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Khameneí, responsabilizó a Arabia Saudita por la muerte en una estampida de al menos 717 personas (al menos 125 de nacionalidad iraní) que participaban en la tradicional peregrinación religiosa musulmana del “hajj” en las afueras de la ciudad saudita de La Meca.
“El Gobierno saudita está obligado a asumir su gran responsabilidad en este amargo incidente y cumplir con sus obligaciones conforme con el imperio de la Justicia y la Equidad”, dijo Khameneí.
Khameneí, clérigo chií, apuntó que “la mala gestión e inapropiadas medidas” tomadas por las autoridades sauditas “fueron factores que provocaron esta tragedia y no deben pasarse por alto”.
La máxima figura religiosa y política iraní pidió a los representantes y autoridades del país que pongan toda su capacidad y esfuerzo en curar a los heridos y en reconocer a los fallecidos de nacionalidad iraní, así como para ayudar en lo posible a los musulmanes de otros países.
La televisión pública iraní informa que al menos hay 125 iraníes que han perdido la vida en el incidente.
Además, también señala que las autoridades sauditas no han permitido a la Media Luna Roja iraní acercarse al lugar para ayudar.
Khameneí expresó su condolencia a las familias de los peregrinos muertos y declaró “tres días de duelo nacional” en el país.
No es la primera vez que Khameneí carga contra las autoridades sauditas por su gestión de los lugares santos musulmanes.
Recientemente, el líder supremo iraní envió un mensaje a los peregrinos que cumplen con el “hajj” en el que recordó la responsabilidad y el fracaso de las autoridades sauditas al proteger la seguridad de La Meca tras el accidente que el pasado 11 de septiembre le costó la vida a más de 100 peregrinos al caer una grúa en la gran mezquita de La Meca. EFE
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