Las autoridades indemnizarán con un millón de dólares a la familia del denominado “Preso X”, el australiano-israelí Ben Zygier, miembro del Mosad que se suicidó en su celda en 2010.
Según el pacto alcanzado con la Fiscalía General, la familia del difunto recibirá cuatro millones de shékels (unos 843.000 euros o 1.118.000 dólares), la mitad ahora y el resto en los próximos cuatro años, pero el Estado no reconocerá responsabilidad sobre su muerte.
El acuerdo incluye una cláusula de confidencialidad, por lo que no han trascendido sus detalles.
La investigación sobre la muerte de Zygier, concluyó que se trató de un suicidio y la jueza Dafna Blatman Kedrai, del Tribunal de la Magistratura de Rishon Letzion afirmó que “el fallo de varios elementos del Servicio de Penitenciario causó su muerte”.
El detenido había sido puesto bajo medidas excepcionales en una celda vigilada en la prisión de Ayalón, al sur de Tel Aviv, sin ser identificado.
El caso se conoció en febrero por un reportaje de investigación de la cadena de televisión australiana ABC, que informó que Zygier, judío oriundo de Melbourne, falleció con 34 años de edad a finales de 2010 ahorcado dentro de una celda incomunicada.
De acuerdo con ese medio, Zygier, que llevaba entonces diez años viviendo en Israel, colaboró durante años con el servicio de inteligencia en el exterior, el Mosad y fue detenido en 2010 acusado de un delito de “alta traición”.
Presuntamente, el agente secreto reveló información a funcionarios de la inteligencia australiana ASIO, incluidos datos sobre una operación inminente en Italia.
Zygier estaba casado con una israelí y tenían dos hijos menores, uno de ellos nacido días antes de su suicidio. EFE
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