El presidente de Rusia, Vladimir Putin, levantó hoy una prohibición sobre la venta de sistemas de defensa de misiles aéreos S-300 a Irán, dijo el Kremlin, luego de que Teherán acordara un acuerdo con Occidente por su programa nuclear. Funcionarios israelíes denunciaron la decisión como pruebas de la insostenible nueva “legitimidad” de Terhán.
“Esto es un resultado directo de la legitimidad que Irán está recibiendo del acuerdo nuclear que está siendo preparado y es prueba de que el crecimiento económico iraní, el cual sigue al levantamiento de sanciones, será explotado para armarse a sí mismo y no por el bienestar del pueblo iraní”, dijo el ministro de inteligencia de Israel, Yuval Steinitz, en una declaración, según The Times of Israel.
Funcionarios israelíes dijeron que la provisión de este tipo de dispositivos a Irán podría evitar que haya un ataque militar a las instalaciones nucleares de su país, informó el Canal 2. Además agregaron que si se avanza con esto, se cambiaría el balance del poder en la región.
El decreto firmado por Putin elimina la prohibición de “envíos de Rusia a Irán” de los sistemas antimisiles S-300, dijo el Kremlin en una declaración. Rusia firmó en el 2007 un contrato con Teherán para venderlos pero nunca fueron entregados debido a fuertes objeciones de Estados Unidos e Israel.
Moscú bloqueó las entregas de misiles superficie a tierra a la República Islámica en el 2010 luego de que las Naciones Unidas pusieran sanciones sobre Irán por su programa nuclear y prohibieran la venta de armamento de alta tecnología. Irán luego emitió una demanda de cuatro billones de dólares contra la capital rusa en una corte de arbitraje en Ginebra.
La decisión de terminar con el congelamiento se tomó luego de que Teherán y las potencias mundiales, incluyendo Rusia, hicieran un importante avance este mes al aceptar un acuerdo marco apuntado a desviar el programa nuclear iraní.
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