Una delegación de la Fuerza de Defensa de Israel viajó a Moscú tras el “muy delicado incidente” del derribo, el lunes por la noche, de un avión ruso Ilyushin en Siria y mantuvo varias “reuniones objetivas y profesionales” con importantes funcionarios rusos, según informó hoy, viernes, a su regreso un alto mando militar.
Los israelíes les mostraron todas las evidencias al respecto con las que cuentan, incluida información operativa y de inteligencia sobre el fortalecimiento de la posición de Irán en ese país y su continuo contrabando de armas para la organización terrorista libanesa Hezbollah, y la grabación de la llamada telefónica entre ambas partes que adelantaba el ataque a sus depósitos en Latakia.
Según el oficial superior, que habló bajo condición de anonimato, todos los aviones se encontraban en el espacio aéreo israelí o aterrizaban en sus bases cuando el Ilyushin fue alcanzado, en medio de una veintena de misiles antiaéreos que fueron disparados de manera irresponsable por el régimen sirio.
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