Aparecieron volantes que afirmaban que los judíos y el Estado de Israel estuvieron detrás de los ataques terroristas ocurridos el 11 de septiembre 2001 en Estados Unidos.
Los volantes fueron pegados en postes telefónicos, escaparates y en el interior del campus de una escuela secundaria de Novato, una ciudad ubicada en California, Estados Unidos, con una población que supera los 50.000 habitantes.
En los volantes se afirmaba que israelíes bailaron en el predio siniestrado de las Torres Gemelas, que un judío ganó miles de millones de dólares al cobrar una póliza de seguro y que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, tuvo palabras elogiosas respecto a los ataques, y culminaban con la frase “¡Despierta Estados Unidos!».
Ante estos infundios la reacción de repudio fue general, el alcalde de la ciudad, Eric Lucan, tanto como las autoridades policiales y del distrito escolar emitieron un comunicado condenando los volantes.
Por su parte Nancy Appel, directora asociada de la ADL (Anti-Difamation League) afirmó: “Estos son viejos estereotipos sobre el 11 de septiembre. Es una pieza más en el auge del antisemitismo que estamos viendo en general».
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