La BBC expresó que decidió suspender temporalmente las operaciones de noticias dentro de la Federación Rusa mientras evalúa las implicaciones de la nueva legislación adoptada por las autoridades rusas.
«La seguridad de nuestro personal es primordial y no estamos dispuestos a exponerlos al riesgo de una persecución penal simplemente por hacer su trabajo», dijo el director general de la BBC, Tim Davie, en un comunicado.
«Me gustaría rendir homenaje a todos ellos (el personal de la BBC), por su valentía, determinación y profesionalidad», agregó Davie.
Por otro lado, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, exigió que se imponga una zona de exclusión aérea sobre su país tras el bombardeo ruso a la planta nuclear de Zaporizhzhia, la más grande de Europa.
El ataque no produjo niveles elevados de radiación, pero Zelensky evoca la explosión y el incendio de la planta nuclear de Chernobyl en 1986 para alertar sobre nuevos ataques.
La planta “podría ser como seis Chernobyls. Los tanques rusos sabían lo que estaban bombardeando… Esto es terror a un nivel sin precedentes”, denunció.
La planta nuclear de Zaporizhzhia es la tercera más grande del mundo.
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