Ciudad de México.- La NASA y la organización civil Mad Science buscan despertar la curiosidad de los niños mexicanos para introducirlos al mundo de la ciencia y del universo, por ello, invitan a los menores a un diplomado que se llevará a cabo en el museo tecnológico de la Comisión Federal de Electricidad (Mutec) en Ciudad de México, en donde a través de seis sesiones los niños aprenderán y se acercarán a los conceptos del espacio como son los cohetes, la atmósfera, las estrellas, el Sol y la Luna.
Según informó el diario Milenio, el curso se realizará durante los sábados 10, 17 y 24 de noviembre, con horarios de 10:00 a 12:00 y de 12:00 a 14:00 horas.
Mad Science es una agrupación internacional líder en educación científica a escala mundial que nació en Montreal, Canadá, hace 25 años. Ésta realiza el programa educativo Academia de Futuros Exploradores del Espacio, para menores de entre 7 y 12 años, el cual es un proyecto global que se desarrolla en 28 países.
Almendra Carrillo, directora general de Mad Sciece en México, dijo en una entrevista con Milenio que “las alternativas energéticas de la humanidad no van a salir del planeta, sino fuera de éste. Por eso hicimos el diplomado (…) se trata de acercar a los niños quienes son los que van a tomar las decisiones en el futuro sobre el espacio”.
Señaló que la iniciativa de esta organización internacional “es la forma en que tú acortas la distancia que existe entre el conocimiento y el desarrollo tecnológico con la educación formal, es la fórmula, por eso se llama niños por la ciencia”.
En un comunicado Mad Science recuerda lo importante que es inducir a los jóvenes en este ámbito del conocimiento, ya que argumentan que se prevé que para el 2050 la población se incrementará a 10 mil millones de personas, por lo que la posibilidad de suministrar energía eléctrica a bajo costo y que conserve el medio ambiente será un desafío amedrentador.
Cambio de mentalidad
La directora de Mad Science destacó lo importante que es cambiar de mentalidad en el país con respecto a la ciencia, pues se percibe como algo muy complicado. El fenómeno está relacionado con los padres de los niños sin importar el nivel social o económico de la familia.
“El problema de la ciencia no es un problema de pobreza o de recursos, ya que quienes tienen dinero tampoco se acercan a la ciencia (…) hablo de todos los estratos sociales, ya que los papás que supuestamente tienen recursos económicos altos, que viajan, ven otras realidades y tienen otro nivel cultural y educativo, prefieren que sus hijos vayan a la natación, al taekwondo o al ballet”, explicó. Señaló que hasta los mexicanos privilegiados que en teoría tienen acceso a otras realidades y conocimiento ven la ciencia como algo pesado encriptado y agotador”, argumentó Almendra Carrillo.
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