Dos semanas después de la caída del régimen en Ucrania, y tras la incertidumbre generada tras el avance militar ruso en Crimea se intensifica, la situación en la región sigue siendo inestable e inflamable, afectando incluso a la comunidad judía local.
El gobierno interino de Ucrania ha emitido nuevas leyes, muchas de ellas con una orientación nacionalista, lo que ha provocado disturbios en las regiones de habla rusa en el país. Muchas de estas personas de etnia rusa en el este de Ucrania temen al nuevo régimen y aspiran a ser anexados por Rusia.
Dina Liebman, directora de la casa local Hillel en Simferopol, Crimea, comentó a la agencia Tazpit del deterioro general de la situación de la seguridad, y mencionó que la comunidad judía está muy activa y alerta: “Hemos cancelado los planes más grandes debido a la situación, pero hemos seguido adelante con nuestros programas más pequeños, como el voluntariado con los niños en los dormitorios y el trabajo con las personas mayores”. Respecto a las posibilidades de antisemitismo, alegó que “no he percibido un cambio de actitud de la población local hacia nosotros. Siento que todo el mundo está dispuesto a apoyarse unos a otros y extender la ayuda, si es necesario, independientemente de su origen étnico”.
Sin embargo, Anatoly Ganadin, presidente de la organización de las comunidades judías en la península de Crimea, recientemente ha experimentado el antisemitismo en Simferopol. El 28 de febrero, el día después de la caída del gobierno de Yanukovich, Ganadin fue a la sinagoga de la “Ner Tamid” en la ciudad y encontró un graffiti antisemita; esvásticas y la consigna “Muerte a los judíos” rociada en toda la fachada. “Desafortunadamente, el antisemitismo ha sido siempre una parte de la vida aquí”, explica Liebman, aunque “no es generalizado y no es una línea política de ningún partido. No estamos temerosos de posibles futuros pogromos. Por supuesto, cualquier expresión de la lucha contra el antisemitismo es desagradable y grave. En Simferopol no ha habido pintadas antisemitas en los últimos veinte años, pero sí en otras ciudades. Creo que tales expresiones de sentimientos antisemitas y nacionalistas no son el resultado de los últimos acontecimientos. Simplemente son unos pocos individuos que han decidido expresarse ya que el país está en un estado tormentoso”, expresó Liebman.
“No estamos temerosos de los nacionalistas ucranianos, porque no van a tener éxito en la guerra de Crimea. Nadie va a dejarlos entrar” añadió Ganadin. Mientras en Ucrania la población está dividida en bandos pro-ruso y anti- ruso, la comunidad judía se mantiene unificada. Liebman, explicó que ningún jefe comunitario judío ha expresado su opinión sobre el tema.
Fuente: Agencia Tazpit
DEBEN SACARLOS QUÉ ESPERAN.
eso decían en la Alemania de 1936