El primer ministro, Biniamín Netanyahu, tomo el avión con destino a Washington, acompañado de su mujer Sara, para su primer encuentro con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, programado para el miércoles.
“El presidente Trump y yo coincidimos en los peligros que emanan de la región, así como las oportunidades. Hablaremos de ambos y también de la mejora de las relaciones entre Israel y Estados Unidos en muchos, muchos campos”, declaró Netanyahu antes de emprender el viaje.
En su página de Facebook dejó otro mensaje, junto a las banderas de ambos países, en el que aseguró que la alianza entre los dos Estados ha sido siempre fuerte y “está a punto de hacerse más fuerte”.
El primer ministro confirmó que también se reunirá con el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, el secretario de Estado, Rex Tillerson, así como líderes republicanos y demócratas de la Cámara y el Senado estadounidenses.
El avión despegó sobre las 15.00 de la tarde y está previsto que aterrice en EEUU unas doce horas después.
Irán y los palestinos marcarán la agenda del encuentro con Trump, al que Netanyahu acude presionado por el ala nacionalista para rechazar oficialmente la solución de los dos Estados en Oriente Medio.
“Tenemos que hacer todos los esfuerzos para evitar una confrontación”, dijo Netantahu sobre esta cuestión a sus ministros en la sesión del Gabinete.
El jefe de Gobierno les recordó que Trump apuesta por la reactivación de las negociaciones entre palestinos e israelíes.
El líder del partido opositor Yesh Atid, Yair Lapid, deseó buena suerte al mandatario israelí y pidió tanto a la oposición como a los miembros del Ejecutivo y de la coalición gubernamental apoyo durante esta visita.
“Las relaciones con Estados Unidos son uno de los pilares de la seguridad nacional de Israel y es importante para construir buenas relaciones de trabajo con la nueva administración desde el primer día”, señaló Lapid.
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