Huixquilucan escribe hoy una página de orgullo continental. Con los ojos del hemisferio puestos en ella, la presidenta municipal Romina Contreras Carrasco lleva a la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA) algo más valioso que estadísticas: lleva el latido de una comunidad que decidió cambiar su destino.
“Donde otros ven barreras, nosotros vimos oportunidades para sanar”, podría ser el lema de esta gesta que hoy inspira a 34 países. El Complejo Rosa Mística no es solo el sistema de salud municipal más grande de México -con sus 11 instituciones y 200 mil servicios anuales-. Es el abrazo que recibe al niño que nace en San Pío, la mano que sostiene al abuelo en el Centro Gerontológico, la luz que guía a jóvenes en los CRIA contra las adicciones.
Un modelo que nació de las necesidades del pueblo
Con voz emocionada, Contreras relató cómo en 2017 Huixquilucan enfrentaba el mismo dolor que hoy agobia a millones en América:
- Madres que recorrían kilómetros para un chequeo prenatal
- Abuelos que elegían entre medicinas o comida
- Jóvenes sin acceso a rehabilitación
“Transformamos el miedo en acción“, confesó ante los líderes internacionales. Hoy, el 90% del territorio tiene cobertura con:
- 3 hospitales regionales
- 27 Centros Comunitarios
- Clínica de salud mental
- Estancias infantiles
El milagro cotidiano de la salud cercana
“Lo más hermoso”, compartió Romina, “es ver cómo cambia la vida cuando la salud deja de ser un privilegio“. Contó casos que conmovieron al auditorio:
- Doña Carmen, 78 años, que ahora recibe terapia sin viajar 2 horas
- El pequeño Diego, cuyo diagnóstico temprano salvó su vista
- Mariana, quien venció las adicciones en el CRIA Santa Rita
Un mensaje que traspasa fronteras
Frente a los datos crudos de la OPS -79 millones de americanos en riesgo financiero por gastos médicos-, la mandataria planteó:
“La salud no es un gasto, es el cimiento de sociedades fuertes“. Reveló el “secreto” del modelo:
- Voluntad política que pone a las personas primero
- Trabajo comunitario puerta por puerta
- Innovación que derriba barreras
El legado que sigue creciendo
Mientras proyectaba imágenes del Jardín Infantil Santa Renata y el Albergue Mater Dei, Romina hizo un llamado:
“Cuando invertimos en salud, sembramos paz. Cada consulta, cada vacuna, es un ladrillo en el camino hacia la equidad“.
El auditorio estalló en aplausos cuando mostró cómo Huixquilucan redujo en 60% los traslados médicos externos -ahora la esperanza viaja menos, y llega más rápido-.
Al cierre, con los ojos brillantes, la presidenta compartió:
“Detrás de cada número hay una sonrisa recuperada, un sueño restaurado. Esto no es nuestro logro, es el triunfo de un pueblo que se atrevió a creer“.
Huixquilucan hoy no solo exporta un modelo sanitario, exporta esperanza con rostro humano.
¿Qué sigue? El modelo se presentará en la Cumbre de Alcaldes por la Salud en noviembre.
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“La verdadera medicina no cura cuerpos, cura comunidades” – Testimonio anónimo del CRIS
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