Ignatz Bubis nació en Breslau, Alemania (hoy Wroclaw, Polonia) el 12 de enero de 1927, hijo de Jehoshua Josef Bubis, un empleado en la industria del transporte marítimo; y Hanna Bronspiegel.
En 1935, después del ascenso de los nazis al poder, la familia buscó seguridad mudándose hacia el este, hacia la ciudad de Deblin, Polonia. En septiembre de 1939, sin embargo, los alemanes ocuparon la ciudad de importancia estratégica y un año más tarde establecieron un gueto.
Hanna Bubis murió de cáncer en diciembre de 1940 y dos de los hermanos mayores de Ignatz desaparecieron en la parte de Polonia ocupada por los soviéticos. El resto de la familia fue confinada al gueto de Dublin, antes de ser deportados a Treblinka, a finales de 1942, donde murieron.
Ignatz, sin embargo, permaneció en el gueto hasta 1944, cuando fue enviado a trabajar en una fábrica de municiones en el campo de trabajo de Czestochowa. En 1945 fue liberado por el Ejército Rojo. Al liberarse del campo se mantuvo a sí mismo por el comercio entre los países ocupados por la Unión Soviética y con Berlín. Cuando, en 1949, los rusos lo acusaron de tráfico ilegal de café, Bubis huyó a la zona occidental de la ciudad. Allí comenzó a cotizar en oro y se convirtió en un importador de joyas.
En 1953, se casó con Ida Rosenmann. Cuando la pareja, que tenía una hija, se trasladó de Berlín a Frankfurt-am-Main, en 1956, Ignatz comenzó a invertir en bienes raíces, mientras que Ida se hizo cargo del negocio de joyería familiar.
Bubis prosperó y se convirtió en un hombre de influencia en la política tanto de Frankfurt como del Estado de Hesse. Por ello, era quizás inevitable que algunas de las críticas hacia los Bubis tuvieran un tono antisemita.
El ejemplo más dramático fue la obra de Rainer Werner Fassbinder: «La Basura, la Ciudad y la muerte», que contó con un personaje llamado \’el Judío Rico\’, que muchos asumieron se basaba en Bubis. La noche de su estreno, en 1985, un grupo de unos 30 judíos, entre ellos Bubis, tuvieron una (pacífica) discusión de tres horas con los miembros de la audiencia y de la compañía teatral sobre la obra y su lugar en la Alemania post-Holocausto. Al final, la obra nunca fue puesta en escena.
Se desempeñó como presidente del Comité Central de Judíos en Alemania desde 1992 hasta la fecha de su muerte.
Con la duplicación de la población judía de Alemania durante la década de 1990, el perfil de Bubis creció y se convirtió en un defensor abierto, no sólo para los intereses judíos, sino también contra la discriminación a otros grupos minoritarios como los gitanos y los turcos.
Después de su muerte, el 13 de agosto de 1999, su cuerpo fue trasladado en avión a Israel y fue enterrado, según su deseo, en la ciudad de Jerusalem.
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