El oficial francés Alfredo Dreyfus, condenado por transmitir secretos militares a los alemanes, es despojado de su rango en una humillante ceremonia pública en el patio de la Escuela Militar de París. El capitán de artillería judío, condenado con pruebas endebles en un juicio sumamente irregular, comenzó su sentencia de cadena perpetua en la famosa prisión de Devil’s Island en la Guyana Francesa cuatro meses después.
El caso Dreyfus demostró el antisemitismo que impregna al ejército francés y, como muchos elogiaron el fallo y a Francia. El interés en el caso decayó hasta 1896, cuando se revelaron pruebas que implicaron al mayor francés Ferdinand Esterhazy como culpable. El ejército intentó suprimir esta información, pero se produjo un revuelo nacional y los militares no tuvieron más remedio que llevar a Esterhazy a juicio. En enero de 1898 se celebró un consejo de guerra y Esterhazy fue absuelto al cabo de una hora.
En respuesta, el novelista francés Emile Zola publicó una carta abierta en la portada del Amanecer titulado “J’Accuse”, que acusaba a los jueces de estar bajo el control de los militares. Por la tarde se habían vendido 200.000 ejemplares. Un mes después, Zola fue sentenciado a prisión por difamación, pero logró escapar a Inglaterra. Mientras tanto, del escándalo nació una peligrosa división nacional, en la que nacionalistas y miembros de la Iglesia católica apoyaron a los militares, mientras que republicanos, socialistas y defensores de la libertad religiosa se alinearon para defender a Dreyfus.
En 1898, el mayor Hubert Henry, descubridor de la carta original atribuida a Dreyfus, admitió que había falsificado gran parte de las pruebas contra Dreyfus y fue encarcelado, un día después se suicidó. Poco después, Esterhazy huyó del país. Los militares se vieron obligados a ordenar un nuevo consejo de guerra para Dreyfus. En 1899, fue declarado culpable en otro juicio espectáculo y condenado a 10 años de prisión. Sin embargo, una nueva administración francesa lo perdonó y en 1906 la corte suprema de apelaciones anuló su condena. La debacle del asunto Dreyfus provocó una mayor liberalización en Francia, una reducción del poder de los militares y una separación formal de la Iglesia y el Estado.
“L’affaire Dreyfus” puso de manifiesto junto con el asunto de “las fichas”, la influencia masónica en el Ejército Francés de aquella época…..