Después de la realización de cuarto certamen electoral en Israel y conforme a sus resultados, Naftali Bennett – líder del partido Derecha – inició pláticas con el Primer ministro Netanyahu con el fin de explorar posibilidades de instituir una nueva coalición gubernamental. Consciente de los tropiezos y tensiones que gravitan en el actual entendimiento político entre Bibi y Beni Ganz y buen conocedor del carácter del primero por haber servido como su asesor hace algo más de cinco años, Bennet procede con cuidado y paciencia en estas conversaciones.
Hasta aquí no ha aceptado compromiso alguno. Trascendió sin embargo que fue recibido en la residencia jerosolimitana del Primer ministro, un hecho singular considerando las tensiones personales entre Sara Netanyahu y Ayeled Shaked, la segunda figura en Derecha. Además, Bennet habría exigido desde el inicio de las pláticas servir el primer año como ministro de defensa e inmediatamente después como Primer ministro. Exigencia que de momento no fue aceptada.
Por otra parte, Bennet no se inclina a compartir el poder con Mansur Abbas que obtuvo cuatro lugares en la Knesset y defiende los intereses de la población árabe que constituye un quinto de la población de Israel. Obviamente, también el sector neokahanista con sus cinco representantes rechaza cualquier contacto con Abbas. He aquí el dilema de Netanyahu: sin la agrupación que aquel preside, no podrá levantar un gobierno estable.
Ante este agreste e incierto escenario Naftali Bennett está negociando con discreción y en paralelo con Yair Lapid quien obtuvo 17 asientos en el parlamento y se inclina a hacerle concesiones a pesar de que el primero apenas cuenta con seis. Sus discretas pláticas avanzan estimuladas por la juventud relativa de ambos – frisan los 50 años en contraste con Netanyahu que supera los 70 – y por la compartida desconfianza que este último les inspira.
En estas circunstancias, de no ocurrir algún choque militar de amplias proporciones en el Medio Oriente – las pláticas de Bennet con Lapid ofrecen buenas perspectivas. En este caso se conformaría una amplia coalición integrada por Guidón Saar, Beni Ganz, y los líderes de la izquierda israelí.
En cualquier caso, en el curso de las próximas dos semanas y después de los programados festejos por la independencia de Israel, estos escenarios ganarán claridad.
Artículos Relacionados: