Fascinante, encantador y de proporciones bíblicas, el desierto de Negev es el epítome de los paisajes desérticos. Es en este horizonte ilimitado, a menudo descrito como el nexo entre el cielo y la tierra, nos encontramos con un hotel sin igual: el lujoso Six Senses Shaharut.
Una gran cantidad de actividades, desde descubrir monumentos arqueológicos y naturales hasta deportes extremos. Actividades que incluyen a toda la familia, como safaris en camello o en jeep y excursiones al Mar Rojo, nos esperan en el Negev. Desde el lujoso hotel Six Senses Shaharut, el desierto yace a nuestros pies, listo para ser explorado.
En este árido paraíso en el distrito de Arava en Israel, viví una experiencia de adrenalina, belleza natural, aventura y diversión de la mano del maravilloso equipo de Guest Experiences del hotel: exploré el desierto en bicicleta de montaña eléctrica.
Descubrí las majestuosas formaciones rocosas, disfrutando del aire fresco mientras pedaleaba por el sendero nacional de una sinuosa en el desierto de Negev, saludando a íbices nubios en el camino. Viendo el sol descender dramáticamente entre los valles, la arena y las rocas, navegué mi lujosa bicicleta todo terreno entre un impresionante paisaje desértico, fascinada con la magia del momento.
Regresando al hotel y después de disfrutar de mi espectacular suite, artísticamente integrada al paisaje, deleité mis sentidos con los exquisitos sabores de la cocina del exclusivo restaurante Midian de Six Senses Shaharut. Su horno tabun que produce una cocina étnica progresiva con influencias mediterráneas e israelíes y su vista panorámica nos sumerge en la belleza del Negev.
Desde exquisitos cortes de carne hasta platos centrados en los vegetales del huerto del hotel, cada mordida trae consigo los sabores de la tierra y de la historia – tuétano, alcachofa, mantequilla de Riesling con sabia son algunos de los ingredientes que convierten cada platillo en una aventura hedonista y original.
El resort ofrece un enfoque creativo de la cocina, combinando lo mejor de las influencias israelíes y mediterráneas mientras adopta la filosofía Eat With Six Senses de productos locales, frescos y de temporada. Cuando es posible, los ingredientes se recolectan de los jardines orgánicos del complejo y de agricultores cuidadosamente seleccionados en los kibbutzim cercanos.
El diseño es una interpretación moderna de la arquitectura de las antiguas civilizaciones de la región, en particular los nabateos nómadas que eran hábiles comerciantes y se especializaron en tallar su ciudad capital, Petra, en los acantilados rocosos de la cercana Jordania.
Artesanos locales trabajaron en el hotel Six Senses, incluidos carpinteros, soldadores y albañiles, y un kibutz cercano o el colectivo Neot Smadar suministraron hormigón reforzado con fibra de vidrio para la construcción.
El diseño de Six Senses Shaharut tiene como objetivo sincronizar a los huéspedes con el paisaje de dunas naturales al mantener una relación constante entre las experiencias de vida en interiores y exteriores.
‘Shaharut’ se traduce como el momento justo antes del amanecer, a ese instante de belleza efímera que vive, inmortal, en nuestra memoria
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