París, 20 de septiembre
Señor presidente,
La historia terrorista reciente de Francia está marcada desde el atentado con bomba en la sinagoga Copérnica de 1980 hasta la masacre del restaurante Goldenberg en 1982, la exhumación en el cementerio judío de Carpentras de 1990 de un cadáver colgado de un paraguas, la tortura hasta la muerte de Ilan Halimi en 2006, el ataque a la escuela judía de Toulouse en 2012 y el 2015. El asesinato de rehenes en supermercados Hyper Kosher, el asesinato en 2017 de Sarah Halimi y en 2018 de Mireille Knoll y otras innumerables víctimas del antisemitismo.
Añádase a estos, los objetivos no judíos del terrorismo, entre los que se encuentran Charlie Hebdo, el apuñalamiento de un sacerdote, el asesinato de policías y soldados fuera de servicio, la decapitación de un maestro de escuela, la embestida de peatones en Niza y el 2015. Atentado terrorista en el Stade de France, los restaurantes de París y el teatro Bataclan, actualmente en juicio.
Ya sea que la víctima sea judía o indiscriminada, los perpetradores son predominantemente yihadistas islamistas. Este denominador común se quiebra, sin embargo, en el tratamiento jurídico de los agresores.
Algunos magistrados pueden haber sido influenciados por sus profesores de derecho, activos en el levantamiento de mayo de 1968, quienes por lo tanto parecían incapaces de creer que los jóvenes musulmanes desfavorecidos, víctimas del racismo, pudieran convertirse en sus perpetradores. Algunos ataques a personas o instituciones judías han sido objeto de sentencias “enguantadas de seda”, o lo que yo llamo “fallos de puertas giratorias”.
Entre los peores casos hasta la fecha, está el del asesino de Sarah Halimi, gritando “Allahu Akbar” mientras la arrojaba desde un balcón hacia su muerte. El caso fue “desestimado” porque el autor estaba “bajo la influencia de estupefacientes”.
Toulouse actúa como la sede del movimiento francés BDS (boicot, desinversión y sanciones contra Israel), considerado ilegal pero nunca juzgado … Toulouse también fue donde Mohamed Merah, en su motocicleta, mató, entre otras víctimas, a un rabino, maestro y padre. con sus dos niños pequeños y luego tiró a una niña de 8 años por su cabello antes de dispararle a quemarropa.
Mi colega, el rabino Abraham Cooper, decano asociado y director de Acción Social Global del Centro, y yo, nos habíamos reunido con el liderazgo musulmán para buscar un terreno común para desactivar el antisemitismo.
Lamentablemente, la exoneración de la semana pasada de un imán de la mezquita de Toulouse, que había pedido matar judíos en nombre de Mahoma, es una señal desalentadora. Una vez más, la justicia francesa ha abierto las puertas a la incitación al odio y la violencia.
Señor Presidente, ha anunciado la creación de un “Islam francés”, respetuoso del estado de derecho y hacia la diversidad de la sociedad de este país. Ahora es el momento de su nacimiento.
Muy respetuosamente,
Shimon Samuels
Shimon Samuels es Director de Relaciones Internacionales del Centro Simon Wiesenthal. Se ha desempeñado como Director Adjunto del Instituto Leonard Davis de Relaciones Internacionales en la Universidad Hebrea de Jerusalén, Director Europeo de ADL y Director de Israel de AJC. Nació en Reino Unido y estudió en Reino Unido, Israel, Estados Unidos y Japón.
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