Oficialmente hemos comenzado la temporada de las fiestas decembrinas, en la cual las calles y hogares de todo el mundo se llenan de esperanza e ilusiones y comienza a brillar cada rincón con luces. De cualquier ciudad, país, o religión que seas, hagamos estas fiestas más sostenibles.
Sin duda, los pequeños cambios pueden marcar la diferencia en la reducción de nuestra huella ambiental durante este periodo. Comprar de forma inteligente, utilizar envolturas recicladas, velas ecológicamente sostenibles, revisar todo y validar si se puede reutilizar o donar antes de tirarlo a la basura, emplear tecnología en alumbrado y pensar en usar menos es lo mejor, y son solo algunos ejemplos de los miles de prácticas que podemos emplear para contribuir con nuestro medio ambiente en esta temporada y de manera permanente en nuestro día a día.
Planeemos mejor para reducir el desperdicio de alimentos, considerando que la mayoría de nosotros somos bastante buenos para ser creativos con nuestros recalentados, y en especial en esta época pensemos en más austeridad y en aquellos que menos tienen, o bien, que favoreceríamos un poco más con alguna aportación, como los comedores comunitarios.
Justo sobre este tema, hace unos días tuve la oportunidad de participar virtualmente en el reconocimiento al Programa Mundial de Alimentos de la ONU con más de 20,000 colaboradores, llevando de manera directa cada año alimentos a 100 millones de personas a nivel mundial, y quien recibió el Premio Nobel de la Paz en 2020. Este es un merecido reconocimiento derivado de la gran labor por combatir el hambre en el mundo. y especialmente, en zonas de conflicto, “evitando el uso del hambre como un arma de guerra”. Con este galardón, el Comité que selecciona el Nobel “desea volver los ojos del mundo hacia los millones de personas que padecen o enfrentan la amenaza del hambre”. “Hasta que llegue la vacuna de coronavirus, la comida es la mejor vacuna contra el caos”, afirmo el Comité Noruego del Nobel en su anuncio del ganador.
Asimismo, también resalto la importancia de apoyar en consumo entre los pequeños productores locales, reduciendo así la movilidad y con ello la huella de carbono.
Por otro lado, en cuanto a uso eficiente de energía eléctrica, si los hogares tuvieran un medidor y monitoreo inteligente del consumo de su energía estaríamos apoyando de manera directa a la reducción de las emisiones de carbono. Por lo mismo, otra gran opción para implementar en esta época es cambiar a luces LED de manera permanentes, cuando se trata de decoraciones ecológicas, los LED son mucho mejores que las luces incandescentes tradicionales, porque consumen hasta un 80% menos de energía. Otra gran práctica es cambiar a luces de energía solar al aire libre, esto no sólo trae ahorros ambientales, sino que también se reducirán las facturas de energía, y así todos ganamos en el ciclo de la sostenibilidad.
Esta época a pesar de estar en un año de lo más retador en todos los sentidos que podríamos esperar, es un tiempo para recordar y aprender del pasado y esperar y actuar para un mejor futuro para la humanidad, nuestro planeta y sobre todo nuestra salud. Gracias por tus acciones sostenibles a favor del planeta y espero que tu hogar se llene de amor, paz y alegría, hoy y siempre.
Si quieres presenciar la ceremonia y festejo de la entrega del Premio Nobel de la Paz 2020 puedes consultarla en:
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