Estoy enojado y no puedo evitar estar enojado por lo que este país enfrenta.
No estoy enojado con el coronavirus que amenaza con causar tantos estragos que podría desatar una segunda Gran Depresión. Después de todo, es solo un virus que probablemente acechó en un murciélago en algún lugar de China hasta que fue transferido a otro animal antes de llegar a los seres humanos. Es un virus Está tratando de vivir. Hubo otros antes y hay otros que aún no se nos han presentado.
Pero estoy enojado
Estoy enojado porque 63 millones de estadounidenses decidieron hacer un hombre presidente que cada uno de nosotros sabía que no tenía las calificaciones ni el carácter para estar en la Casa Blanca. Estoy enojado porque pasaron los últimos tres años excusando su comportamiento y discurso desagradable y fingiendo que él, y él solo, era responsable de una economía que ya estaba creciendo mucho antes de que tomara juramento.
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